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Cultivo de la tilapia requiere sumo control

MARÍA ANTONIA LÓ[email protected] El cultivo del pez tilapia en el Lago de Nicaragua no representa peligro medio ambiental alguno si el mismo se hace en jaulas y se lleva un estricto control de la actividad afirmó Agnes Saborío, directora del Centro de Estudios del Camarón de la Universidad Centroamericana. La tilapia se ha convertido en […]

MARÍA ANTONIA LÓ[email protected]

El cultivo del pez tilapia en el Lago de Nicaragua no representa peligro medio ambiental alguno si el mismo se hace en jaulas y se lleva un estricto control de la actividad afirmó Agnes Saborío, directora del Centro de Estudios del Camarón de la Universidad Centroamericana.

La tilapia se ha convertido en una alternativa generadora de empleo en el país, en municipios de Chontales, Granada, San Francisco Libre y Río San Juan ya que el mercado exterior es muy amplio y los precios actuales son equivalentes a los de una libra de camarón.

Recientemente personas ligadas a la protección del medio ambiente advirtieron que el cultivo de la tilapia en el Lago de Nicaragua podría acabar con la especie nativa de guapote debido a una sobrepoblación en ese cuerpo de agua.

Saborío indicó que la discusión sobre los daños que la tilapia está causando al guapote nativo del Lago de Nicaragua no son muy claros ya que debe establecerse una diferencia en el proceso de cultivo de la especie.

En 1988 se introdujo la tilapia al Lago de Nicaragua, sin previo estudio de impacto ambiental y sin conteo de la población. No obstante, es difícil creer que el pez esté causando daños al guapote por cuanto se experimenta diariamente un proceso de extracción lo que permite el equilibrio en el cuerpo de agua.

Reconoció que la introducción de cualquier especie nueva a un cuerpo de agua crea un impacto ambiental negativo o favorable, no obstante, la tilapia introducida libremente en el lago no está causando efectos mayores debido a la constante extracción.

Por otro lado explicó que la tilapia de cultivo en jaulas no debe representar peligro alguno al guapote porque no está en capacidad de reproducirse y el control de alimentos es estricto debido al alto costo del quintal que deben asumir los productores de la especie.

Reiteró que se han formado una serie de mitos sobre la tilapia que realmente no existen, por ejemplo, se dijo que se come los huevos del guapote, cuando en realidad se alimenta de algas, asimismo, tiende a guardar sus huevos en la boca hasta que eclosionan y eso ha inducido a afirmar que está comiéndose los del guapote.

Por el contrario el guapote es una especie carnívora y por tanto se come a la tilapia lo que ayuda a conservar el equilibrio en el espacio de ambas especies en un mismo cuerpo de agua.

Tampoco entra en contradicción con el turismo, añadió Saborío, porque eso depende de la cantidad de jaulas que se instalen. “El turismo paga para que los lleven a ver el cultivo de tilapia, es una especie limpia, no despide olores, no ensucia el lago, siempre y cuando no esté en medio del balneario”.   

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