CELSO MARTINEZ O. – [email protected]
MATAGALPA.— Mediante sentencia dictada por la Jueza del Juzgado Primero Civil de Distrito de Managua, Yelba Aguilera, se declaran como herederos universales de todos los bienes de la sociedad Rodolfo-Isolina-Victoria Alvarado Sucesores, (RIVASCA), a los verdaderos descendientes del Dr. Ignacio de Loyola López Rivera, fallecido el pasado 18 de febrero de 1998.
Los datos obtenidos en el expediente revelan que al morir el Dr. López Rivera sin haber hecho testamento, aparecieron personas que utilizando documentos alterados, quisieron hacerse pasar como sus herederos, originando un pleito judicial con los legítimos beneficiarios.
Durante el juicio se presentó la señora Patricia Alvarado Castillo, la que mostrando partidas de nacimiento alteradas, pretendía ser heredera de los bienes de RIVASCA.
Rola en el expediente una partida de nacimiento en la que la señora Alvarado Castillo aparece como nacida el 30 de septiembre de 1951 en la ciudad de Jinotepe, hija del señor Rodolfo Alvarado Balcáceres y de Mercedes Castillo Mendieta, partida inscrita con el número 61,tomo 8506, folio 031 en el Registro del Estado Civil de las personas en Jinotepe.
Existe otra partida de nacimiento en la que aparece como Patricia López Alvarado, nacida el 5 de marzo de 1954 en La Concepción, departamento de Masaya, hija de Ignacio López Rivera y de Isolina Alvarado de López. Reposición de partida realizada en Masatepe e inscrita bajo el número 171, tomo 0064, folio 32.
Durante el juicio el Dr. Ignacio de Loyola López Ortega, uno de los verdaderos herederos, demostró que Patricia no es hija de su padre, el Dr. López Rivera y acompañó una cédula de identidad en la que se identifica con el nombre de Patricia López Alvarado, cédula número 409-050354-0005F, la que fue tramitada con la partida de nacimiento emitida en Masaya.
Otra de las situaciones que lograron determinar la falsedad de datos suministrados por Patricia Alvarado Castillo, es otra solicitud de cédula de identidad en la que las dos Patricias, López Alvarado o Alvarado Castillo, viven en la misma casa: B-436 de la Colonia “10 de Julio” en la ciudad capital.
La jueza Aguilera no dio lugar a la solicitud de declaratoria de herederos realizada por Patricia Alvarado Castillo y declara como herederos universales a José Ignacio López Alvarado; Ignacio de Loyola López Ortega; Inés (mujer) López Ortega; Bayardo Ignacio López Martínez; María Auxiliadora López Ocón; Ileana de Fátima López Martínez y Douglas Francisco López Martínez.
La sentencia fue copiada bajo el número 39, folios 185-195, tomo 205.
La sociedad RIVASCA fue inscrita bajo el número 3323, páginas 203-213, tomo 19 libro mercantil.
Entre los bienes heredados figuran dos fincas cafetaleras, una de ganado, una casa en Jinotepe y otra en la ciudad capital.
Con la sentencia a su favor, los herederos de los bienes de RIVASCA alertan a la ciudadanía a no realizar transacciones con personas que todavía se hacen pasar como los herederos de la sociedad antes mencionada.