José Adán Silva [email protected]
El subdirector del Instituto para el Desarrollo de la Democracia (IPADE), Mauricio Zúñiga García, consideró ayer que el Consejo Supremo Electoral administra de forma discrecional las leyes electorales, al no especificar en el Reglamento de Ética Electoral qué acciones son antiéticas en las campañas propagandísticas de los partidos políticos.
“Opino que la discrecionalidad de la Ley Electoral hay que eliminarla, debe mejorarse la ley en el sentido de que se especifique claramente qué puede ir y qué no puede ir”, señaló Zúñiga, agregando que no es saludable para el país el que una institución tome decisiones en base a juicios de valores e interpretaciones.
“Yo considero que el problema no está en eliminar uno u otro spot publicitario, sino que el problema radica en la discrecionalidad de la ley. Actualmente está en mano del CSE interpretar a su juicio, qué es ético y qué no es ético y yo creo que esto no debe estar en mano de las personas, sino en la ley, que es donde debe reglamentarse estos aspectos”, observó Zúñiga, al comentar la situación generada a raíz de que un magistrado del CSE ordenó al Partido Conservador eliminar un spot de contenido supuestamente reñido con la Ley Electoral.
Según Zúñiga, las reglas del juego electoral deberían estar claras para todos los partidos políticos, y también para las compañías publicitarias, para que éstas no elaboren materiales que vayan en contra de las leyes electorales, y evitarle pérdidas y daños a determinado partido.
“Yo creo que se debe de hacer un reglamento concertado entre los partidos políticos y el CSE, de tal manera que no venga una medida a caer como sorpresa sobre determinado partido, y así evitar que estos partidos consideren después que se les están lesionando sus intereses y que se les esté excluyendo”, analizó Zúñiga.
“En un país como el nuestro, con altos niveles de polarización política, en la medida que se tengan reglas del juego claras, y no se estén cambiando sobre el camino, la campaña va a tener un mejor clima y se van evitar situaciones que puedan dañar más la imagen de Nicaragua”, apuntó.
“En la medida que se van descubriendo vacíos en la Ley Electoral, y el CSE se ve obligado a estar reglamentado sobre la marcha, se van creando inconformidades que pueden restarle legitimidad a cualquier proceso electoral”, dijo Zúñiga, quien propuso al CSE valorar las quejas de los partidos políticos en este proceso, para evitar que los errores cometidos no se repitan en las elecciones presidenciales del próximo año.