- Tiene un documento firmado que lo unía al
San Fernando por
una temporada
Edgard Rodríguez C. [email protected]
El humor habitual de Norman Cardoze, no le alcanza para disimular su tristeza. En las expresiones del conocido infielder de Masaya, hay una mezcla de nostalgia y frustración, mientras en las semifinales se extrañan su brillo defensivo y su violento cañoneo, al igual que sus palabras directas y a menudo certeras.
“Me siento como león enjaulado. Por primera vez en mucho tiempo he quedado fuera de la mejor etapa del campeonato como es la postemporada. Pero realmente no hicimos méritos para estar ahí (en semifinales) y ahora tendremos que ver los toros de largo y esperar hasta la próxima campaña”, señalaba Cardoze, mientras Rivas y Bóer se batían en el terreno.
Pero en esa próxima temporada, Norman espera no estar enfundado en el uniforme gris con vivos anaranjados de las Fieras, sino en el rayado (parecido al de los Yanquis) que utiliza el Bóer, equipo que ha situado al prestigiado jugador en su mira. Y todo hace indicar que se trata de un sentimiento compartido. Ambos (club y jugador) desean estar juntos.
“Realmente es muy posible que juegue con el Bóer en la liga próxima. Mi relación con el San Fernando está fracturada y creo que para el bien de todos, mejor me voy a marchar”, señala con firmeza el artillero que fue capaz de acumular .317 de promedio, con 6 jonrones y 29 remolques, lo que no obstante, no bastó para sostener a las Fieras con vida.
A inicios de la actual temporada, Norman se vio envuelto en un gran conflicto junto a Jorge Luis Avellán y Cairo Murillo, porque deseaban cambiarse de equipo. Debió intervenir una Comisión de Arbitraje, la que logró que volvieran al San Fernando, pero quedó claramente establecido que lo harían por un año y que una vez concluido ese período, quedaban libres.
“No se me ocurre de ninguna manera que haya gente interesada en violentar ese acuerdo. La parte de nosotros, ha sido cumplida y si FENIBA es respetuosa de los convenios, será la primera en permitirnos libertad de movimiento. Y como eso está firmado y tenemos nuestro abogado, vamos a recurrir a la instancia necesaria para que se cumpla”, advierte Norman.
EN CONFIANZA
– Siempre te quejaste de Julio Sánchez…¿Qué te pareció como manager?
– “Tremendo. Es el mejor que hay aquí. Tuve roces con él, pero por un lado era un asunto de inmadurez mía y por otra que Sánchez no había sido claro en algunas opiniones sobre mí”.
– ¿Ciertamente querés unirte al Bóer?
“Más que me guste el Bóer, es que no deseo seguir en Masaya. He sido irrespetado. Una vez el Ing. Jorge Solís me regaló 100 dólares y dijeron que me había vendido. Imaginate”.
– Con el Bóer jugaste muy bien en 1997, ¿no?
“Recordá que en esa ocasión como refuerzo batee 521, con 5 jonrones y 21 empujadas en 18 juegos. Pienso que haríamos un mejor plantel del que tiene ahora mismo”.