Harold Ernesto García Martínez [email protected]
Me adhiero totalmente al criterio presentado por el Editorial de LA PRENSA publicado en 4 de febrero, titulado “La peor forma de injusticia”. Igualmente pienso que ha sido una mala asesoría la que ha tenido don Enrique Bolaños.
Sin embargo, dado los altos niveles de politización que existen en la sociedad nicaragüense, resulta difícil encontrar gente con la capacitación y honestidad apropiadas para iniciar la gigantesca tarea de “limpiar” y reestructurar el Poder Judicial en Nicaragua, y que no esté directa o indirectamente vinculada a uno de los extremos políticos.
Corrigiendo los errores de los funcionarios del gobierno pasado, don Enrique tiene la oportunidad que jamás ha tenido presidente alguno en la historia de Nicaragua: demostrar al pueblo y a la comunidad internacional que ahora sí tenemos un presidente que viene a poner las cosas y a todo el mundo en su lugar. La gente honesta de Nicaragua y el mundo darían su respaldo al Ing. Bolaños, de paso empezaríamos a limpiar la turbia imagen que de Nicaragua tiene el mundo en materia de justicia.