- Gobierno golpea a ejército privado de clérigo radical
El gobierno chiíta del primer ministro Nuri al-Maliki detuvo a 400 combatientes de una milicia liderada por un clérigo que lo respalda, y al menos 19 personas murieron en diferentes hechos de violencia en Irak.
El anuncio de al-Maliki buscó calmar las dudas sobre su predisposición a combatir a los milicianos chiítas, especialmente a los del Ejército Mahdi, leal a una de las figuras que más lo apoya: el clérigo radical Muqtada al-Sadr. Se cree que muchos de esos milicianos son responsables de gran parte de la violencia sectaria que golpea al país desde el año pasado.
La violencia, mientras tanto, prosiguió el jueves con la muerte de al menos 22 personas y 55 salieron heridas en una serie de ataques. Yassin Majid, un consejero de al-Maliki, calificó como incorrectos a los informes de que decenas de líderes milicianos habían sido detenidos.
Pero un comandante del Ejército Mahdi de Bagdad dijo que las fuerzas iraquíes y extranjeras habían lanzado un operativo importante el martes en Um al-Maalef, un vecindario chiíta del sur de la capital.
“Detuvieron a todos los que pudieran portar armas. Nuestra gente en el área nos dijo que fueron arrestadas cerca de 400 personas”, declaró el comandante de la milicia a condición de mantener su nombre en el anonimato, porque no estaba autorizado a identificarse.
Dijo que en diciembre los soldados estadounidenses habían matado en el vecindario de Ciudad Sadr a uno de los principales comandantes del Ejército Mahdi, conocido como Abu al-Sudour.
Por otra parte, en el ataque más letal, tres vehículos cargados de explosivos detonaron casi simultáneamente frente a un mercado de vegetales cerca de un enclave chiíta que limita con el vecindario de Dora, de mayoría sunita, en el sur de Bagdad. Al menos 10 personas murieron y 30 resultaron heridas, dijo la policía.
La fuerza de la explosión de las 10:20 de la mañana voló parte del techo de metal que cubría el área de cargas, e incendió a una furgoneta.
El vecindario al-Rashid está localizado cerca del distrito Abu Dishir de Dora, cerca de una carretera que conecta a la capital con las áreas del sur del país. La mayoría de los propietarios de puestos y trabajadores eran chiítas del distrito Abu Dishir, aunque también había vendedores sunitas.
Cerca de una hora después, un automóvil estacionado también explotó en un área comercial visitada por gente de todas las religiones en el centro de Bagdad. Al menos cuatro personas murieron y 10 resultaron heridas.