- Pequeños productores del norte de Nicaragua logran incrementar volúmenes de producción
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Más de 25 pequeños productores de miel han logrado mejorar las técnicas de crianza de las abejas y de comercialización del producto, con el programa de Apoyo de Transformación y Comercialización de Productos Apícolas, promovido por la Fundación para el Desarrollo Tecnológico, Agropecuario y Forestal de Nicaragua (Funica).
El proyecto, que se encuentra en su etapa final, se desarrolla en San Juan de Río Coco y San Lucas, en el departamento de Madriz, al norte de Nicaragua.
Julio Centeno, encargado de Funica en la zona norte del país, señaló que con el proyecto más de 25 apicultores de las comunidades descritas han elevado el porcentaje de crianza de abejas reinas, lo que ha permitido incrementar la cantidad de miel producida.
En este sentido, Centeno detalló que antes de la ejecución del programa en la zona, los apicultores lograban una producción anual de hasta 410 litros de miel. En cambio, actualmente se obtienen en promedio 3,000 litros por año.
Los apicultores beneficiados con el programa están aglutinados en la Asociación de Apicultores del Norte (Apinor).
LAS TÉCNICAS DE CRIANZA
Centeno explicó que para lograr el incremento en la producción de miel de abejas los apicultores han recibido capacitación sobre el manejo de colmenas que pueden ser fabricadas por el hombre o hechas en un hueco natural.
Además se les orientó sobre la importancia que tiene la crianza de la abeja reina en el proceso de producción de la miel, pues es la encargada de producir huevos para la reproducción de abejas obreras, que contribuyen a la producción.
Centeno subrayó que “los apicultores han aprendido a crear y elevar el sistema reproductivo de la abeja reina”.
Añadió que con el programa los apicultores han aprendido a seleccionar a las abejas reinas, que son ubicadas en colmenas donde son alimentadas con jalea real, una miel con alto valor nutritivo que estimula la producción de huevos.
Otro de los factores que han favorecido el crecimiento de la producción de miel de abeja ha sido la adecuada selección del área natural donde viven estos insectos.
Por ejemplo, Centeno señaló que uno de los sitios ideales para que las abejas extraigan mayor cantidad de miel de las flores son las plantaciones de café.
LA CALIDAD
En otro orden, Centeno señaló que la calidad de la miel de abeja se detecta por la transparencia y limpieza del dulce.
Detalló que “entre menos desechos del panal tenga la miel, la calidad será mayor, lo que permite tener un mejor precio en el mercado”, cantidad que no precisó.
En el marco del programa los apicultores también recibieron capacitación sobre cómo mejorar la presentación y empaque del rubro y el control de inocuidad de la miel para obtener mejores ofertas de compra.
Además se realizó un intercambio de experiencias entre apicultores de Boaco, Quilalí y las cooperativas Las Flores, de El Sauce, municipio de León, entre otros.
Y para incentivar la comercialización de la miel, Centeno señaló que Apinor se integró a una red de instituciones que se dedican a la venta de este rubro en el país.
En total el programa tiene un costo de más de 41,000 dólares, los que fueron financiados por Funica.