La Unidad Médica Nicaragüense (UMN) considera que la ministra de Salud, Martha Verónica Reyes, debe ser interpelada en la Asamblea Nacional para que rinda explicaciones sobre el actuar negligente de ese ministerio ante la pandemia del nuevo coronavirus Covid-19, que para el personal sanitario es una de las principales causas de la dramática crisis por la propagación del virus y la mortalidad causada en Nicaragua.
José Antonio Vásquez, presidente de la Unidad Médica Nicaragüense, refirió a LA PRENSA, que la titular del Ministerio de Salud (Minsa) es la primera que debe explicar cómo se llegó a la grave situación que enfrentan los hospitales públicos y privados, donde ya no hay capacidad para atender la cantidad de pacientes Covid-19, si el régimen aseguró tener la capacidad de personal y de instalaciones para hacerle frente a la crisis.
Vásquez recordó que el pasado 23 de marzo, la Unidad Médica hizo público la alerta que acompañó con una serie de recomendaciones para que como país se pudiese enfrentar de la mejor manera la pandemia, sin embargo, las autoridades del Minsa como a nivel central del Ejecutivo, prefirieron ignorar el llamado del gremio médico.
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“Es una de la primeras funcionaria, la ministra de Salud, que hay que pedirles cuentas sobre la grave situación que estamos enfrentando. Como Unidad Médica elevamos una serie de medidas para evitar que se llegara al sufrimiento de tantas muertes que estamos reportando ahora. Si el Minsa hubiese tomado estas recomendaciones, esto no se estuviera dando. Tomar medidas desde el principio nos hubiese evitado esta situación de dolor, ella (Reyes) como ministra de Salud, tiene que rendir cuentas de los errores del Minsa en no tomar acciones para salvaguardar la vida de los nicaragüenses”, reclamó el doctor Vásquez.
El régimen a través del Minsa, ha minimizado la pandemia del Covid-19 negándose a adoptar el protocolo de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) que recomienda la cuarentena social de varias semanas para frenar los contagios durante la curva exponencial, fase en la que ya está Nicaragua.
Una fuerte campaña sobre las medidas higiénicas, de prevención como el uso de mascarillas cuando se está en lugares públicos, reforzar con equipos de protección al personal médico, así como realizar pruebas masivas para detectar los casos asintomáticos como positivos del Covid-19 para identificar los focos de infectación, son parte de las recomendaciones de la OMS y OPS que la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo, se han negado a cumplir prefiriendo exponer a la población. “El Minsa es cómplice del sufrimiento del pueblo”, reclamó el doctor Vásquez.
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Entre las preguntas que la ministra Reyes debe responder, en un proceso de interpelación en la Asamblea, estaría el ¿Por qué no se tomaron las medidas recomendadas por la OMS y OPS? ¿Por qué en vez de eso, se hizo lo contrario al promover actividades de aglomeración sabiendo que eso exponía a cientos de ciudadanos al contagio del virus?.
“¿Por qué al inicio de la crisis se prohibió el personal médico usar mascarillas y de que se alertara a la población sobre las recomendaciones para evitar el contagio del Covid-19? ¿Por qué se ha preferido una política partidaria que una respuesta de asegurar la vida de la mayoría de los ciudadanos? ¿Por qué el Minsa no tomó preventivas de forma enérgica? ¿Por qué no se han realizado pruebas masivas para detectar a los pacientes positivos? ¿Cuántos test se han realizado? ¿Han identificado los focos de contagios? ¿Qué acciones en concreto han hecho en las zonas de mayor infectación?” Esas son parte de lo que a consideración del doctor Vásquez, debe responder la ministra Reyes.
“¿Por qué se prefirió llegar a este caos? ¿Por qué ellos, los del Minsa prohibieron al personal médico usar los medios de protección? Querían que la población no cayera en pánico y eso ha tenido graves consecuencias, hay cientos de médicos, enfermeras y demás personas enfermas, en cuidados intensivos luchando por su vida”, reclamó el presidente de la Unidad Médica Nicaragüense.
El Minsa registra 759 casos positivos de coronavirus, de los cuales 35 han muerto. Son cifras cuestionadas por las asociaciones independientes como el Observatorio Ciudadano, agrupado por médicos, cuyos informes cifran en más de tres mil los contagiados y al menos 805 personas con síntomas relacionados con la pandemia.
“Todo los derechos fueron violados y nos sometieron a un riesgo mayor. El virus no camina solo, si hubiesen las autoridades del Minsa salido al frente dando información veráz, objetiva no estuviéramos en el caos sanitario que enfrentamos”, aseguró el doctor Vásquez.
La Unidad Médica Nicaragüense registra 225 entre médicos y personal de salud enfermos con el virus. Aún cuando están en la primera línea del contagio, el personal sanitario sigue desprotegido debido a que las autoridades en los hospitales solo les dan una mascarilla para uso de una semana, denunció el gremio.
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PLC evaluará si piden comparencia de funcionaria
Solicitar los informes, comparecencias y la interpelación de los ministros en la Asamblea Nacional es facultad de los diputados, de acuerdo a la Constitución de la República y la Ley Orgánica del Poder Legislativo.
El jefe de la bancada del Partido Liberal Constitucionalista (PLC), Maximino Rodríguez, dijo que en lo personal respalda la posición de la Unidad Médica en que la ministra Reyes rinda un informe ante el foro parlamentario sobre el manejo y respuesta de la pandemia del Covid-19.
Sin embargo, Rodríguez refirió que será después de la reunión de la bancada del PLC, la tarde de este 1 de junio, que decidirán si gestionan formalmente ante la junta directiva para que citen a la ministra Reyes a que en el plenario de la Asamblea exponga las acciones concretas del Minsa para responder a la crisis, como para que la funcionaria responda ante los graves señalamientos de negligencia para atender los casos de contagios y muertes por el virus, que han saturado los hospitales públicos y privados.
Aunque el régimen controla la Asamblea al tener setenta de los 91 legisladores en funciones, la Ley Orgánica establece varios caminos legales para que, de ser solicitado por uno de los jefes de las bancadas de minoría, la comparecencia de un ministro o presidente de ente autónomo no pueda ser bloqueada por los orteguistas.
La interpelación de un ministro para que prospere requiere que la soliciten “el jefe de bancada que represente al menos un tercio de los diputados y diputadas en ejercicio”, es decir al menos 30 legisladores. Son votos que no tiene el PLC porque solo tienen 14 diputados. Incluso si se le sumaran los de la bancada ALN-PLI y Apre, la del Partido Conservador y de Yatama sumarían entre todos 21 votos.
Ley Orgánica establece varios mecanismos
Sin embargo, la Ley Orgánica del Poder Legislativo, Ley 606, tiene otros caminos legales para que los ministros rindan cuentan en la Asamblea.
El capítulo VIII de la Ley Orgánica establece el procedimiento para solicitar informes, comparecencia e interpelaciones de funcionarios públicos. Los informes a los ministros puede ser solicitados por el jefe de bancada o “por un mínimo de cuatro diputados”, según el artículo 158 de la Ley Orgánica del Poder Legislativo. Los ministros están obligados a enviarlos por escrito los informes solicitados en un plazo máximo de ocho días hábiles, y la junta directiva de la Asamblea ha gestionarlos, según ese mismo artículo.
En tanto el artículo 160 de la Ley establece que la solicitud de comparencia de ministros, viceministros, procurador, subprocurador, presidentes o directores de entes autónomos y gubernamentales ante el plenario de la Asamblea Nacional será solicitado “por cualquier jefe o jefa de bancada o por un mínimo de cinco diputados”.
“La comparecencia del funcionario solicitado será obligatoria, bajo los mismos apremios que se observan en el procedimiento judicial. En caso de que el citado no presentare durante esa sesión plenaria justificación por su falta de comparecencia, la Asamblea Nacional lo destituirá y lo pondrá en conocimiento del Presidente de la República para que dentro del plazo de tres días de recibida la notificación haga efectiva la destitución. Si la justificación fuere aceptable, el plenario podrá resolver que sea citado para una segunda y última vez”, cita el artículo 160.
Los directivos de la Asamblea no están facultados a bloquear las solicitudes de informes ni de la comparencia de los ministros. El jurista y exdiputado, Eliseo Núñez, consideró que los del PLC o cualquiera de las otras bancadas de minoría deben someter la propuesta para que sea interpelada la ministra de Salud, Verónica Reyes, “porque sabemos que los diputados del régimen se opondrán a que sea llamada, pero así esos diputados tendrán que responder públicamente porqué se niegan a que rindan cuentas”, dijo Núñez.
“La Asamblea es un vitrina social y no hay otro mecanismo que haya superado eso. Se supone que cada uno de los diputados representa a la población, entones es ahí donde se les rinde cuenta al pueblo por parte de los funcionarios. Por muy desprestigiados que estén los sistemas legislativos, y aunque no prospere la solicitud de interpelación de la ministra de Salud, que se consigne al régimen a dar explicaciones”, señaló Núñez.
Martha Verónica Reyes, quien asumió el pasado 1 de abril, sustituyendo a Carolina Dávila quien duró en el cargo nueve meses. Dávila había reemplazado como ministra de Salud a Sonia Castro a quien la dictadura la removió del cargo tras ser sancionada por violaciones a los derechos humanos por parte de los gobiernos de Estados Unidos y Canadá.
Sonia Castro también está sancionada por la Unión Europea por su participación en la represión a las protestas ciudadanas iniciadas en abril del 2018, ya que a Castro se le responsabiliza de haber dado la orden de no atender a los manifestantes heridos, así como despedir a los doctores y personal médico que se negaron a dejar morir a los protestantes y además participaron en las manifestaciones.