Decenas de nicaragüenses que permanecen en uno de los albergues habilitados en la provincia de Chiriquí, Panamá, grabaron un video en donde solicitan a las autoridades nicaragüenses que acorten los tiempos de recibimiento de ellos porque cada día que pasa, el riesgo de contagio aumenta al estar en hacinamiento.
En el video se aprecia a niños, jóvenes y adultos –entre ellos uno en muletas– mientras un hombre habla de las dificultades que pasan en el sitio que corresponde a una iglesia, del apoyo brindado por las autoridades panameñas y el anhelo de estar pronto en su país.
“Hacemos un llamado de carácter de urgencia, solicitándole al canciller de la República de Nicaragua (Denis Moncada) y a las entidades correspondientes que por favor humanitariamente nos apoyen para podernos evacuar de una manera más agilizada de este lugar”, dice el nicaragüense.
La grabación del video, contó posteriormente uno de los ciudadanos albergados, es para hacer conciencia en las autoridades nicaragüenses de su lamentable situación y por tanto, que la aprobación de los viajes los pase de cada 72 horas, a cada 24 horas o si es posible cada 8 horas, como antes se acordó.
Además de la incomodidad a la hora de dormir, que muchos lo hacen en el piso y atacados de mosquitos, está la realidad de que hay niños, embarazadas y adultos mayores y no se cuenta con un personal médico en el albergue. Por ello, se pide que prioricen a estas personas con el resto de sus familiares.
“Lo único que queremos es que por favor se tomen otras medidas para salir lo más pronto y con esto queremos hacer un llamado para que en esas listas se les dé prioridad a las familias, aquellos que andan con sus esposas y sus hijos, aquellos que andan con sus niños pequeños en brazos, aquellas mujeres embarazadas que corren el riesgo de estar en este lugar. Nos da pesar mirar como nuestros paisanos, nuestros niños, están durmiendo en el sereno”, agrega la misma persona.
Este video fue grabado en la noche del lunes 6 de julio, previo a la salida del segundo grupo de nicaragüenses en el contexto de la pandemia del Covid-19, el cual llegó a la frontera de Peñas Blancas la tarde del martes 7. El primero ingresó a territorio nacional el pasado sábado 4 de julio. Todo el grupo, según la Comisión Permanente de Derechos Humanos (CPDH) es de 1,108 personas.