Como una relación “tóxica”, así califica Sorayda Arana Sandino la relación de pareja que durante dos años sostuvo su hermana María Estela Arana, de 33 años con Héctor Hugo Guillén Olivares, de 64, quien la mató de dos cuchilladas este 31 de julio en los alrededores de la iglesia Santo Domingo en Las Sierritas de Managua.
Sorayda Arana explicó que Guillén la ofendía y peleaban cada vez que tomaban licor. “Él (Héctor Guillén) hace una semana le vino a hacer un escándalo a la casa”, recuerda Sorayda Arana.
Arana confirmó que su consanguínea y Héctor Hugo Guillén eran bebedores consuetudinarios.“Ellos tomaban licor constantemente en la calle o cualquier lugar”, agregó la entrevistada.
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María Estela Arana viajó este 31 de julio a Las Sierritas de Managua en compañía de Jorge Guadamuz Vanegas, de 47 años, quien también recibió una herida con el cuchillo con el cual Héctor Guillén acuchilló dos veces a su expareja.
Le perforó un pulmón
“Una de las estocadas fue en el brazo derecho y la otra le perforó el pulmón izquierdo “, precisó la apesarada hermana.
Héctor Guillén, quien ahora está preso en la Estación Uno de Policía ubicada en el mercado Oriental, vivía solo en el barrio El Riguero, porque su esposa radica en los Estados Unidos y es quien le mandaba dinero para su manutención.
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Una familiar de Héctor Guillén, quien la mañana del sábado le pasó alimentos en la estación policial, dijo desconocer las circunstancias en que sucedieron los hechos por los cuales su pariente ahora está en prisión.
La Policía informó del caso a medios oficialistas, y escuetamente dijeron que el crimen ocurrió a las 11:11 de la mañana del viernes en residencial Santo Domingo, cuando Guillén “en estado de ebriedad agredió a la víctima al momento que esta pasaba por el lugar”.