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CONTENIDO EXCLUSIVO.Lucy Valenti, presidenta de la Cámara de Turismo, ha sido una de las personas más críticas del modelo de “diálogo y consenso” que fue impulsado por el Cosep y el gobierno de Daniel Ortega entre 2009 y 2018; también fue crítica de las reelecciones de José Adán Aguerri al frente de la cúpula empresarial en diez ocasiones, incluso en 2010 ella se postuló para la presidencia del Cosep frente a Aguerri, pero en aquellos años la mayor parte del empresariado cerraba filas tras el modelo que les había ofrecido Ortega, y tras Aguerri, quien era el interlocutor escogido por el Gobierno.
Es por eso que no sorprendió verla impulsando la candidatura de Mario Hanon junto con otras dos presidentas de cámaras, Ximena González, de Inde y Carmen Hilleprandt, de la Cámara de Comercio. Ellas fueron los rostros más visibles de “la bancadita”, como llaman sus adversarios dentro del Cosep al sector que apoyó a Hanon, aunque entre ellos prefieren llamarse “las cámaras vandálicas”.
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Por esa visibilidad en la recién concluida contienda electoral del sector privado que ganó Michael Healy, Valenti, junto con González y Hilleprandt tuvieron que soportar calumnias y difamaciones lanzadas desde el anonimato, pero que Valenti sostiene venían de un sector del empresariado donde predomina “un machismo que no perdona que las mujeres nos atrevamos a emitir nuestra opinión y a ejercer nuestro liderazgo”.
Esos ataques, en el momento más oscuro de la campaña, llegaron incluso a tocar a su familia, por lo que la empresaria considera que en esta nueva etapa se debe revisar el código de ética y conducta en la organización para contemplar sanciones contra quienes difamen a otro miembro de Cosep. Sobre esto y otros retos que enfrentará la cúpula empresarial en los próximos tres años habló en esta entrevista.
Recientemente concluyeron las elecciones en el Cosep, como presidenta de la Cámara de Turismo ¿cuáles considera son los retos más importantes del nuevo presidente, Michael Healy?
Son varios los retos que están por delante. Entre ellos puedo mencionarte la aprobación de unos estatutos que permitan un Cosep más moderno, acorde con los retos que nos toca enfrentar de cara a las elecciones del 2021 y post 2021 ya con un nuevo gobierno.
En esos nuevos estatutos se deberá reafirmar nuestro compromiso con la libertad de empresa, la democracia y la institucionalidad del país, de tal manera que nunca más se vuelva a apartar la vista de estos temas fundamentales.
Asimismo los estatutos deberán dejar claro y sin lugar a interpretaciones la gobernanza interna que permita una mayor profesionalización de su ejecutivo y un rol más activo de su junta directiva. Así como también regresarle a las cámaras su liderazgo en los temas que le competen a cada una.
Otro tema importante será trabajar para hacer valer la política de género que se aprobó hace más de diez años y que luego se engavetó. Necesitamos reactivar la comisión para involucrar a todas las mujeres que estamos en las distintas directivas de nuestros respectivos gremios, pero no solo reactivar la comisión sino que institucionalizarla para que no sea un trabajo que se haga solo cuando le guste al presidente de turno.
Usted fue una de los líderes gremiales que propugnó por el cambio de liderazgo en Cosep. ¿Por qué sintió que era necesario?
Porque pienso que Cosep concluyó una etapa con José Adán al frente que ya había dado todo lo que pudo. Si bien es cierto, en los temas económicos en ese período se lograron cosas importantes como el crecimiento económico, importantes inversiones, generación de empleos, eso se hizo a costa de la institucionalidad democrática que tuvo como consecuencia el desmontaje de la aún débil democracia que se venía construyendo a partir de 1990. Y eso fue un terrible error. Con la excusa que los empresarios no debíamos meternos en política y que eso era tarea de los partidos políticos y los movimientos sociales, no golpeamos la mesa como se debería haber golpeado ya que el sector privado era el único interlocutor con el Gobierno.
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Creo que como organizaciones gremiales no debemos meternos en política partidaria, pero definitivamente que sí debemos hacerlo en asuntos políticos que competen con la institucionalidad del país, pues esa sólida institucionalidad y separación de poderes es lo que nos va a garantizar la estabilidad del país y por ende el desarrollo económico y social.
Entonces en esta nueva etapa era urgente un nuevo liderazgo que corrija los errores y nos enrumbe a una nueva etapa.
Por impulsar ese cambio los líderes gremiales que lo hicieron fueron atacados duramente por algunos grupos en las redes sociales. ¿A qué cree que se debió?
A que muchos, acostumbrados al status quo y por razones de intereses personales, les cuesta aceptar los cambios. Pero a ese tipo de cosas debemos enfrentarnos cuando tenemos convicciones firmes de que lo que estamos haciendo es lo correcto. Si te fijás, cada uno de nosotros dio la cara y dijo lo que piensa, no nos ocultamos en el anonimato. Se defendió la necesidad del nuevo liderazgo y se trató con respeto a los dos candidatos que compitieron. Esa sana competencia era lo que queríamos que se diera. Sin nuestro esfuerzo no hubiesen surgido candidatos y lo más probable es que hoy el resultado fuese otro.
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En esa campaña sucia, que se escondió en la oscuridad del anonimato, prevalecieron los ataques especialmente a las dirigentes mujeres que nos atrevimos a proponer y propugnar por el cambio de liderazgo. Las presidentas de INDE, Ximena González; de la Cámara de Comercio, Carmen Hilleprandt y mi persona fuimos ferozmente atacadas y difamadas cobardemente y con alevosía. Otra demostración más de que aún existe dentro de una parte del empresariado un machismo que no perdona que las mujeres nos atrevamos a emitir nuestra opinión y a ejercer nuestro liderazgo.
A usted la acusaron desde el anonimato de ser “Caballo de Troya del sandinismo” dentro del Cosep y de estar en manos de El Carmen debido a que un hijo suyo estuvo preso por supuestos delitos vinculados al narcotráfico.
Mi hijo mayor efectivamente estuvo en las ergástulas de la dictadura durante nueve meses, de septiembre del 2019 a junio del 2020. A raíz del despertar de abril del 2018, él se involucró con los estudiantes universitarios y estuvo atrincherado en la Upoli y en la UNAN, razón por la cual fue fichado por la Policía. Estuvieron siguiéndolo por mucho tiempo e incluso en una ocasión que viajamos a Costa Rica por tierra casi fue detenido. No se atrevieron en ese momento a hacerlo, sin embargo fueron armando su teatro y esperaron el momento que consideraron más oportuno para detenerlo y sin prueba alguna, porque no encontraron ni droga ni dinero, ni nada, para acusarlo de “Conspiración para tráfico de estupefacientes”. Historia similar a la que han inventado para todos los presos políticos.
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Por recomendación de nuestros abogados y del gobierno de Seychelles, ya que mi hijo es ciudadano de Seychelles, decidimos mantener un perfil bajo para permitir que la solicitud del gobierno de Seychelles tuviera una respuesta positiva y lograr su repatriación. Su nombre fue incluido en la lista de presos políticos prácticamente desde un inicio. El consejo que recibí fue que este gobierno cedía más a las presiones si no ventilábamos el problema en los medios. Y como comprenderás mi prioridad era sacar a mi hijo de esas mazmorras inhumanas en donde le violaron durante todo ese tiempo sus más elementales derechos. Y gracias al Señor, que todo lo puede, lo logramos el pasado 12 de junio cuando fue repatriado a Seychelles, después de prácticamente nueve meses preso injustamente.
A través de mi hijo, las veces que lo pude visitar, recibí mensajes de los jefes de Auxilio Judicial en los que me decían que si yo “cooperaba” con ellos la situación de mi hijo se resolvía fácil. Mi decisión y la de mis hijos fue mantenernos firmes y dignos y aguantar todo ese tiempo el dolor y el sufrimiento que significó ver a mi hijo en esa condición. En todo este proceso me acompañó el cónsul honorario de Seychelles, señor Damien van Der Schuren, el gobierno de Seychelles y por supuesto nuestros abogados. A todos ellos el agradecimiento eterno mío y de mi familia.
Quiero también denunciar, que mi vehículo personal, que estaba con mi hijo cuando lo detuvieron, no me ha sido devuelto a pesar que hay una orden del juez para que lo hagan. La Policía continúa negándose a entregarlo, así como también los efectos personales que le incautaron cuando lo detuvieron y que incluye su computadora.
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Volviendo al tema de Cosep, ¿cómo piensan ustedes garantizar en estas reformas que este tipo de actitudes y ataques no se repitan en la cúpula gremial?
Las personas que escribieron ese artículo difamatorio y cobarde en mi contra son las mismas que mal informaron a un comentarista político contra Carmen Hilleprandt, ya que en ambos casos usaron el término “Caballo de Troya del sandinismo”; son personas del sector privado y mantienen vínculos con El Carmen. Adicionalmente actúan con una conducta misógina porque no aceptan que las mujeres actuemos con independencia y principios.
Va a ser muy importante de aquí para adelante que la política de ética y conducta que se apruebe en Cosep como parte de la reforma de estatutos se aplique correctamente y que en esta política se incluyan medidas y sanciones para aquellos empresarios, que siendo miembros de nuestras cámaras, se presten a calumniar y difamar a sus colegas porque se sienten, al estar cerca del poder, con derecho para hacerlo aunque no tienen el valor para dar la cara. Medidas disciplinarias deberían ser adoptadas en Cosep para luchar contra la calumnia y la difamación, al menos eso es lo que yo propongo.
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Llamó la atención en las elecciones de Cosep que ninguno de los miembros de las cámaras que apoyaron a Hanon aceptaron puestos en la directiva, incluso en la elección del secretario y el tesorero se tuvo que votar dos veces porque los candidatos no alcanzaban el mínimo de votos. ¿Por qué tomaron esa actitud?
Las experiencias pasadas nos demostraron que con los estatutos que tenemos actualmente, la Junta Directiva no pinta nada. Quedar en la directiva solo hubiese servido para publicar una foto donde se mostrara que la integraban también representantes de cámaras que propugnaron por el cambio. Y estar en esa foto no garantiza que los cambios que necesita Cosep se vayan a dar. Los cambios se van a garantizar cuando todas las cámaras acordemos, y Dios permita de consenso, unos nuevos estatutos que delimiten claramente los roles y funciones de cada uno de los que conformamos Cosep y de su junta directiva y en ese trabajo, que está por delante y que Mike va a liderar, todos nosotros estamos comprometidos.