Pasan los años, se suceden las generaciones y en el horizonte siempre aparece la figura de Dennis Martínez, el jugador de beisbol que más alto se ha elevado en toda la historia de nuestro país.
Dennis tiene las mejores cifras para un nica durante una temporada y también durante una carrera en las Grandes Ligas. Además es el mejor en los playoffs, un territorio que ha comenzado a pisar el veloz Jonathan Loáisiga con los Yanquis de Nueva York.
Martínez saltó tres veces a la postemporada y después de 12 actuaciones, siete de ellas como pitcher abridor, acumuló 2-2 y 3.32 en 43.1 innings, con 1.24 de whip y dos viajes a la Serie Mundial, aunque no la ganó en ninguna de las dos ocasiones.
Su primera incursión fue en 1979 con los Orioles ante los Angelinos en la Serie de Campeonato de la Liga Americana. El nica abrió el tercer juego, detrás de Jim Palmer y Mike Flanagan y llegó al noveno episodio arriba 3-2, pero quedó sin decisión.
Dennis sacó 8.1 innings y un doblete de Rod Carew lo explotó en el noveno. Entró el relevista Don Stanhouse y permitió la carrera heredada del nica (por un error de Al Bumbry en el centerfield) y otra más y Baltimore quedó tendido 4-3 en el Anaheim Stadium.
En 8.1 innings cedió tres carreras y ocho hits, incluyendo jonrón de Don Baylor, sin bases y cuatro ponches en un trabajo de calidad. Baltimore fue a la Serie Mundial y Dennis abrió el cuarto juego y fue agredido con seis hits y cuatro carreras en 1.1 inning por los Piratas, pero no perdió.
Sin embargo, su obra cumbre llegó en 1995 cuando le ganó 4-0 al “monstruo” Randy Johnson. Fue el sexto partido de la Serie de Campeonato de la Americana. Dennis por Cleveland y Johnson por Seattle y tras cuatro innings iban 0-0.
En el quinto inning la tribu se fue arriba 1-0, cuando Álvaro Espinoza se embasó por error en tiro del camarero Joey Cora y llegó hasta segunda base, desde donde anotó por sencillo de Kenny Lofton al bosque izquierdo. Dennis apretó todavía más.
Al final, Carlos Baerga dio jonrón y el nica le ganó 4-0 a Johnson con un trabajo de siete innings sin carreras, cuatro hits y tres ponches, ante el Seattle de Ken Griffey Jr., Edgar Martínez, Tino Martínez y Jay Buhner, entre otros, y Cleveland fue a la Serie Mundial por primera vez desde 1954.
Esa victoria, conseguida la noche del 17 de octubre de 1995, fue celebrada por todo lo alto en Cleveland, a pesar que la batalla fue en Seattle. Johnson trabajó 7.1 innings de ocho hits y cuatro carreras con siete ponches, pero Dennis lo superó con solvencia.
Ya en la Serie Mundial, Dennis abrió el segundo juego y perdió 4-3 ante Tom Glavine, con una labor discreta. En 5.2 episodios admitió ocho hits, entre ellos jonrón de Javy López, con las cuatro carreras, tres bases y tres ponches.
Después reapareció en el sexto partido y lo hizo mejor. No permitió carreras en 4.2 innings antes de ser removido de la colina. El problema fue que Tom Glavine tampoco toleró anotaciones en ocho episodios y se llevó la victoria 1-0 que selló el triunfo de los Bravos en la Serie Mundial.
Luego, cuando se unió a los Bravos para la temporada de 1998, Martínez ganó un partido en labor de relevo en la Serie Divisional contra San Diego. Fue en el cuarto desafío, curiosamente solo sacó un out en sustitución de Denny Neagle y se llevó un triunfo 8-3. En la serie lanzó para 0.00 en 3.1 innings y cuatro salidas.
Vicente Padilla también estuvo fantástico en el 2009 con los Dodgers y terminó con 1-1 y 3.63 en 17.1 innings en tres salidas. Le ganó 5-1 a San Luis con labor de siete ceros y cuatro hits cedidos, superando al boricua Joel Piñeiro. El chinandegano lanzó fuego aquel día.
En el segundo juego de la Serie de Campeonato ante los Filis, tuvo un duelazo con Pedro Martínez que iba 0-1 en siete innings, solo alterado por un jonrón de Ryan Howard contra el nica, antes de que los Dodgers lo voltearan 2-1 en el octavo. No tuvo decisión.
David Green tuvo su oportunidad de participar en la postemporada en 1982. Primero jugó ante los Bravos de Atlanta en la Serie de Campeonato de la Liga Nacional y bateó de 1-1 en su único chance. Luego actuó en la Serie Mundial contra Milwaukee y bateó de 10-2, para .200.
Green, quien es el único nicaragüense que ganó una Serie Mundial, bateó doble y triple contra los Cerveceros y anotó tres carreras. David jugó en los siete partidos de los Cardenales, quienes se llevaron el clásico de otoño 4-3 y el nica se adjudicó el preciado anillo.
Marvin Benard si no fue afortunado. En dos Series de División en 1997 ante los Marlins y el 2000 ante los Mets, acumuló de 14-1 para .070 con los Gigantes, mientras Loáisiga tiene 0-0 y 3.38 en 2.2 innings antes de este año tras labores ante Minnesota y los Astros.
¿Qué será capaz de hacer? Pronto vamos a saberlo. Por ahora Dennis es el mejor, a pesar de que le hizo falta una victoria en Series Mundiales, un logro desconocido para los big leaguers pinoleros.
Edgard Rodríguez está en Twitter: @EdgardR