CARACAS/AFP
Unos 1,500 comercios de la venezolana San Antonio del Táchira, en la frontera con Colombia, cerraron hoy ante amenazas de grupos irregulares descontentos con las medidas de control tomadas en Venezuela contra el contrabando, informaron líderes empresariales locales.
“Desde ayer (jueves) un grupo de individuos se ha dedicado a amenazar a los comerciantes de San Antonio para que cierren sus puertas como protesta por las medidas que viene tomando la Guardia Nacional en la zona para evitar el contrabando de mercancías y combustible en la frontera con Colombia”, explicó a la AFP el presidente de la patronal Fedecámaras Táchira, José Rozo.
Como consecuencia de las acciones de estos grupos, que también obligaron a cerrar algunas escuelas de la zona, la población de San Antonio se encuentra actualmente militarizada, señaló Rozo.
El coronel de la Guardia Nacional, Javier Rosales, responsable de la zona afectada, informó este viernes a los medios locales que “el jueves fueron detenidos cinco ciudadanos colombianos presuntamente pertenecientes a grupos irregulares, quienes habrían estado repartiendo volantes para amedrentar a los comerciantes en el Táchira”.
Desde la semana pasada, la Guardia Nacional lleva a cabo un operativo especial para evitar el contrabando en la zona fronteriza que, según denuncia Rozo, “ha incomodado a la población en general, limitando el derecho al libre tránsito en la zona”.
“No estamos en contra de las medidas de control que toman las autoridades nacionales, sólo pedimos que estas acciones no impidan la actividad comercial y la vida normal en la zona”, agregó.
El gobierno del presidente Hugo Chávez “congeló” en julio las relaciones con Colombia, en protesta por el acuerdo que permitirá a Estados Unidos operar desde siete bases colombianas en acciones contra el narcotráfico y el terrorismo.