CORRESPONSAL / COSTA RICA
El Organismo de Investigación Judicial (OIJ), de Costa Rica, no está claro qué motivó a Alexander Flores Bravo para asesinar a machetazos a la nicaragüense Rosa Martínez López, de 17 años, y a la madre de ésta, Inés Ortiz López, de 38; ocurridos la tarde del martes en el norte del país.
Según el subdirector del OIJ, Francisco Segura, problemas intrafamiliares, por motivos pasionales, pudieron desembocar en los crímenes.
“Es una desgracia, no podríamos hablar que es algo cultural, porque no es que el pueblo de Nicaragua culturalmente sea así. Es una situación de violencia intrafamiliar de las tantas que hay en el país”, declaró Segura.
Tras matar a su mujer (Ana Rosa) y a su suegra (Inés), Flores Bravo intentó suicidarse haciéndose una herida en el cuello, pero no lo logró.
A eso de las 9:00 a.m. de ayer fue dado de alta, para luego ser trasladado a las celdas del OIJ de la localidad. La Fiscalía lo acusará por dos delitos de homicidio calificado y tentativas de homicidio.
Según vecinos del lugar, el hombre últimamente estaba agobiado porque no tenía empleo. Esperaba con ansias la zafra azucarera para cortar caña.
El crimen de Ana Rosa e Inés ocurrió en la comunidad de La Vieja, en Florencia de San Carlos, en el norte del país.
OTROS LESIONADOS
En el incidente también resultó golpeada Yorleni Torres, dueña de la vivienda donde ocurrió el incidente. El hijo de Torres, Denis Obregón, de 13 años, resultó herido en uno de sus brazos porque fue a él quien Flores Bravo le arrebató el machete para cometer los crímenes.
Según el OIJ, el incidente ocurrió a las 3:50 p.m. en una vivienda ubicada 200 metros norte de la escuela de la localidad. El agresor se dirigió a la vivienda de Torres, donde estaban su esposa y su suegra.
Primero le habría pedido comida a la mujer, quien se la negó, posteriormente discutió con ella y aprovechó el momento para quitarle el machete al adolescente de 13 años, quien lo usaba para pelar una naranja.
El OIJ confirmó que las dos mujeres estaban embarazadas, la de 17 años tenía 9 meses, su mamá 5 y medio.
Ver en la versión impresa las páginas: 6 B