El coordinador de la Alianza Movimiento Renovador Sandinista, Edmundo Jarquín, acusó al gobierno de Daniel Ortega de no responder con la misma “buena fe” que ha recibido de la comunidad internacional.
En su programa semanal El Pulso de la Semana, Jarquín dijo que el rechazo de las autoridades electorales a los observadores locales, para los comicios regionales del Caribe, envían una mala señal a la comunidad internacional.
“Con ese anuncio del Consejo Supremo Electoral, ¿en qué queda la buena fe de la comunidad internacional, que hizo algunas concesiones a cambio de la promesa del canciller (Samuel) Santos, que se aceptaría observación electoral? En eso, la buena fe no (fue) correspondida”, indicó Jarquín.
Según el ex candidato presidencial, Ortega intenta “tapar el sol con un dedo” y mantenerse en el poder contando los votos “a su manera”.
“Ortega sigue siendo minoría política y por tanto incapaz de ganar en unas elecciones genuinamente democráticas. Desde el actual Consejo Supremo Electoral salieron esta semana voces reiterando que no habrá observación electoral, que es una de las principales garantías frente al fraude. (Es) otro intento de tapar el sol con un dedo, porque contar los votos a su manera, no hace a Ortega mayoría”, adujo Jarquín.
De acuerdo con Jarquín, el presidente Ortega está consolidando poder económico y político-burocrático, pero no está calando en la mayoría de la sociedad, como lo demuestran la hambruna que enfrenta la zona norte del país y la “tortura” que sufren los jubilados al retirar sus pensiones.
Finalmente, Jarquín dijo que la victoria de la centro-derecha en Chile sobre la concertación de centro-izquierda, que no implicará ningún cambio traumático para la sociedad de ese país, dejó una gran lección para toda Latinoamérica.
“El verdadero conflicto en América no es entre izquierda y derecha, sino entre autoritarismo y democracia”, expresó.
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