CORRESPONSAL/NUEVA SEGOVIA
Cientos de pobladores acompañaron a la maestra de generaciones, María Ardón de Olivas, hasta su última morada.
Formadora de hombres y mujeres de principios en la ciudad de Ocotal, Ardón falleció el jueves pasado a sus 91 años.
La maestra Ardón, muy querida por los ocotaleanos, recibió un merecido homenaje póstumo.
El Concejo Municipal de Ocotal en homenaje de cuerpo presente aprobó otorgarle a la profesora María Ardón de Olivas la Orden hipocrática Doctor Emilio Gutiérrez, asignada a intelectuales y ciudadanos altruistas de la localidad. Asimismo se declaró el pasado viernes 4 de junio asueto municipal manteniendo la Bandera Nacional a media asta.
¿QUIÉN ERA?
La profesora Ardón de Olivas nació el 23 de mayo del año 1919. Inició su carrera en el magisterio a la edad de 15 años en las zonas rurales de Macuelizo, Santa María, El Jícaro y finalmente Ocotal. Se jubiló en 1978 sin dejar de ejercer el magisterio, ganándose el aprecio de los ciudadanos.
“Trabajaba siempre por los más necesitados, el Señor la creó para ser maestra. Toda su carre ra está llena de vocación y amor. Es parte de la historia de nuestro pueblo”, expresó conmovida la profesora Ramona Esperanza Medina.
RETOMAR EJEMPLO
La profesora Miriam Balladares considera que es una obligación inculcarle a las nuevas generaciones el deber de recordar a estas personas con cariño y con respeto. Asimismo que los maestros retomen el ejemplo de maestras como María Ardón de Olivas a quien tilda de “educadora ejemplar e integral, mujer de iglesia, organizadora de su gremio, luchadora incansable para llevar educación a los lugares más alejados de la ciudad”.
Cientos de personas acompañaron a Mariíta, a como le llamaban cariñosamente, a su última morada en el cementerio de Ocotal.
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