CORRESPONSAL/CHINANDEGA
El viernes pasado se llevó a cabo el tercer Taller de Evaluación del Proceso de Adopción del Enfoque Ecosistemático de la Pesca y Acuicultura en el Estero Real, Chinandega.
El tema ha generado preocupación entre los participantes.
El Estero Real, principal zona camaronera en el Pacífico del país, ubicado en el municipio de Puerto Morazán, Chinandega, se ha convertido en el centro de análisis para la vigilancia del recurso hidrológico y evitar que colapse en los próximos años.
René Escoto Masís, coordinador de la FMPP, de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), dijo que hay distintos problemas que tienen que ver con la producción agrícola en los alrededores, sedimentos que afectan el ecosistema y la camaronicultura.
“Pero son todos los actores que tienen actividades productivas en relación a la problemática ecológica. Hay responsabilidades compartidas como el cambio climático, que puede tener implicaciones a largo plazo”, manifestó Escoto.
Trabajan en este análisis el Instituto Nicaragüense de la Pesca y Acuicultura (Inpesca), la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), Ministerio del Ambiente y los Recursos Naturales (Marena), municipalidades, productores, universidades y organismos locales.
EVITAR QUE COLAPSE
Daniel Narváez, delegado del Inpesca, dijo que “la capacidad de carga del Estero Real debe revisarse para poder saber si la explotación es racional y tomar medidas urgentes para evitar que colapse”.
El delegado afirmó que se hará un muestreo para ver la densidad de la población de camarón que se cultiva y el nivel de despale en el Estero Real. “Porque el mangle produce alimento a los camarones, debemos regular, la pesca artesanal que lleva desechos, y los excrementos a orillas que contaminan”, agregó Narváez.
Por su parte el doctor Evenor Martínez, coordinador de la carrera Ingeniería Acuícola (UNAN-León), dijo que para contrarrestar en parte los daños al Estero Real se entregaron en días recientes 20 paneles solares y ahora realizan un estudio para la recuperación del mangle, con parcelas demostrativas.
Además, afirmó que por ahora se desconoce la capacidad de carga del Estero Real, lo que impide el dato de granjas camaroneras que puedan ubicarse ahí.
“Eso tiene un riesgo fundamental para la industria camaronera, que tiene millones de dólares invertidos, significa que podemos caer en autocontaminación, que daría al traste con más de 90 millones en exportaciones del camarón, es lo que produjo el año anterior en las 14 mil hectáreas”, manifestó Martínez.
PESCADORES DENUNCIAN
Antonio Ramos, secretario de la Federación Nicaragüense de la Pesca (Fenicpesca), ubicada en Potosí, El Viejo, manifestó las dificultades en el Golfo de Fonseca con la escasez del recurso. Según Ramos, esto se debe a las decenas de embarcaciones piratas de El Salvador y Honduras. “Se exige patrullaje, pero no es suficiente” , aseguró.
Asimismo, dijo que la siembra del maní les afecta, ya que los peces y tortugas mueren en la zona hace tres años. “Por eso estamos pidiendo nuevos estudios para ver qué se puede hacer y conservar los recursos”, manifestó el dirigente.
En los encuentros participan delegados de instituciones, empresarios, representantes de ONG, universidades y las unidades ambientales de Puerto Morazán, Somotillo y Villanueva.
Al concluir el encuentro el viernes se conoció que el próximo paso es formular un proyecto para financiar a los actores locales, para la implementación del enfoque ecosistémico dentro del plan de manejo ambiental.
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