CORRESPONSAL CARAZO
Pobladores de los municipios de Jinotepe y San Marcos, del departamento de Carazo, denunciaron que están siendo afectados por los basureros clandestinos en las zonas urbanas y suburbanas, donde llegan a botar desechos sin tomar en cuenta las repercusiones que causan a la salud.
Según Abraham Narváez, director de Servicios Municipales de la Alcaldía de Jinotepe, este municipio está enfrentando serios problemas con los basureros ilegales y se contabilizan unos 20 (basureros) a los se les está dando mantenimiento cada dos meses.
- El Alcalde de San Marcos, Orlando Vega, dijo que es necesario que la población tome conciencia .
Vega afirmó que en el mes gastan 800 mil córdobas sólo en recolección de basura y que nada más recuperan 150 mil.
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“Cada dos meses nosotros le estamos dando mantenimiento a esos basureros, tratamos de dejarlos limpios pero estamos viendo que la población no está colaborando con la salud de ellos mismos, porque tardamos más en realizar la limpieza, cuando ellos ya están botando basura otra vez”, dijo Narváez.
El funcionario informó que durante este mes no se ha realizado la limpieza correspondiente debido a que la lluvia ha afectado los caminos, dificultando el acceso a los camiones y carretones recolectores de basura del sector del cementerio, cerca de las comunidades Román Esteban y Aragón.
“Los basureros clandestinos tienen dos o tres años que comenzaron a extenderse en Jinotepe, sin embargo hasta el momento se han mantenido, no han surgido nuevos basureros y esperamos que ya no continúen porque nos afecta mucho y el gasto en limpieza va aumentando también”, agregó el funcionario.
Los barrios más afectados por los basureros ilegales son Cruz de Guadalupe, Ana Virgen Noble, Luis Medrano, Los Belenes 1 y 2 y Villa Rondaría.
Al mes, en Jinotepe se presupuestan dos millones de córdobas para recolección y limpieza pública que incluye: uniforme, mantenimiento de los vehículos y carretones y el salario del personal.
De ese total, sólo se recupera el 60 por ciento debido a que la población no paga por el servicio de recolección de basura.
Ruth Arévalo junto a sus dos hermanos menores llegan todos los días al basurero clandestino ubicado detrás del cementerio de Jinotepe para recolectar material reciclable y luego venderlo.
Así como Arévalo hay muchas personas que viven de la recolección y reciclaje de basura quienes ganan de 20 córdobas a 40 córdobas cuando el día está bueno.
“Yo vengo todos los días desde La Cruz de Guadalupe para recolectar, pero esta semana nos ha ido mal porque sólo los carretones están entrando porque el camino está malo”, dijo Arévalo.
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