El diputado sandinista Evertz Cárcamo animó ayer en el parlamento a los periodistas a mantener su trabajo por los “sin voz”, pero en su discurso omitió la problemática que enfrenta el gremio, así como el cierre de su propio canal de televisión.
Durante su intervención en la sesión especial por el Día Internacional del Periodista, algunos diputados se quedaron esperando que Cárcamo se pronunciara a favor del respeto a la libertad de expresión.
Los legisladores opositores tampoco escucharon a Cárcamo reclamar por la reapertura de su canal, cuya licencia fue revocada por supuestas diferencias con la primera dama, Rosario Murillo.
Róger Suárez, de la Asociación de Periodistas de Nicaragua (APN), destacó que uno de los problemas en Nicaragua es el sectarismo que se ha impuesto de parte del Gobierno del sandinista Daniel Ortega, hacia los medios de comunicación y periodistas, donde hay una especie de “premio-castigo” a través de la publicidad, dejando el Estado sin pautas a los medios críticos a la administración pública.
Por otro lado, en una actividad organizada por el Colegio de Periodistas de Nicaragua (CPN), una vez más quedó en evidencia la división del gremio, pues se generó una polémica al conocerse que se incluyó a la periodista matagalpina Aurora Leytón entre los homenajeados.
El CPN entregó reconocimientos a los más destacados estudiantes de Comunicación y profesionales del periodismo.
Muchos colegiados tildaron a Leytón como “somocista” y para demostrar su descontento se abstuvieron de asistir al acto, en el que el presidente del CPN, Leonel Laguna, reiteró que la placa y el obsequio que se entregaba destacaba la trayectoria profesional y no la militancia partidaria.
En cuanto a la crisis generada por la falta de publicidad estatal que afecta a los medios, pero de manera especial al radioperiodismo, el director del Departamento de Comunicación de la UCA, Gonzalo Norori, reiteró la necesidad de que las organizaciones gremiales sean más beligerantes para exigir al Estado una repartición equitativa.
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