Familiares de José René Morales Guzmán, de 32 años, quien el pasado sábado presuntamente se lanzó desde las laderas del volcán Masaya hacia el vacío con el fin de quitarse la vida, se reunieron en horas del mediodía de ayer en el mismo sitio para buscar ayuda de los bomberos en la búsqueda de su ser querido. Lo que no imaginaron es que la desgracia tocaría de nuevo a su puerta.
Mientras un grupo acompañaba a los rescatistas hacia las laderas del volcán, los tres primos del desaparecido se quedaron en la segunda caseta del mirador tres del volcán, donde fueron sorprendidos por un rayo que impactó la humanidad de Manuel Salvador López Guzmán, de 28 años, quien se encuentra entre la vida y la muerte por la descarga eléctrica recibida.
Francisco Rivas, de 26, fue el segundo afectado mientras que César Antonio Ampié, de 24, ayer se encontraba fuera de peligro.
ESTABA CON CELULAR
Según Manuel Salvador Muñoz, guarda del parque, la víctima Manuel Salvador se encontraba manipulando su celular al momento que el rayo cayó a orillas de la caseta, lanzando los tres cuerpos de los hombres por los aires.
“Es peligroso que en épocas de lluvia y en zonas altas como ésta se manipulen objetos que atraen la energía”, dijo.
Mientras, el Comandante en Regimiento Iván Tijerino, de la Dirección General de Bomberos, manifestó que los signos de vida del joven eran muy débiles, por lo que fue necesario transferirlo hacia el Hospital Lenín Fonseca. En horas del mediodía de ayer la Dirección General de Bomberos suspendió la búsqueda del joven José Morales Guzmán.
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