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David Mercado elabora hamacas desde hace dos años. LA PRENSA/ M. CALERO

Quinchos urgen ayuda

El Centro Integral Quinchos, ubicado en el municipio de San Marcos, Carazo, aloja a más de ochenta niños de la calle de diferentes partes del país que se encuentran en riesgo, a los que brindan apoyo en educación y formación artística, sin embargo, este centro reclama por el escaso apoyo que han tenido de las instituciones del Estado como Mifamilia.

CORRESPONSAL/CARAZO

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  • Zelinda Azura, directora y fundadora del centro integral Quinchos, ubicado en el municipio de San Marcos, Carazo, asegura que el Gobierno antes apoyaba al centro con un bono que le otorgaba el Ministerio de la Familia (Mifamilia), pero este año se les quitó, y sólo sobreviven del apoyo de los organismos internacionales y algunas empresas nicaragüenses.
“Nosotros recibíamos un bono de Mifamilia aproximadamente de 30 mil córdobas al año, es muy poco para nuestros gastos, pero servía para pagar los útiles escolares que les damos a los niños cada tres meses”, dijo.

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El Centro Integral Quinchos, ubicado en el municipio de San Marcos, Carazo, aloja a más de ochenta niños de la calle de diferentes partes del país que se encuentran en riesgo, a los que brindan apoyo en educación y formación artística, sin embargo, este centro reclama por el escaso apoyo que han tenido de las instituciones del Estado como Mifamilia.

Quinchos nació hace 19 años con el objetivo de ayudar a los niños de la calle, actualmente este centro está dividido en dos: La Finca, donde se encuentran 45 niños, y Yahoska, donde están 40 niñas.

En ambos lugares se les enseña a los niños a hacer manualidades, danza, música y hamacas, sin perjudicar sus estudios académicos.

GRAN SATISFACCIÓN

Zelinda Azura, procedente de Italia, es la directora y fundadora del centro.

Comentó que haber dejado su país para venir a ayudar a los niños en riesgo a Nicaragua ha sido su mayor satisfacción, a pesar que un diez por ciento del total de internados, una vez estando fuera del centro vuelven a recaer.

“En estos lugares nosotros reeducamos a los niños, porque vienen de la calle, perdieron conocimiento, pasan por un proceso que se llama filtro, que es para enseñarles una serie de valores que pierden estando en la calle, por lo general son niños trabajadores o inhalantes, que han sido abandonados por su familia o que recibían maltrato”, manifestó Azura.

Departamentales apoyo Carazo Centro Integral Quinchos archivo

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