Los Orientales del Granada debutaron en la pasada edición de la Liga Nicaragüense de Beisbol Profesional (LNBP), y lo hicieron en gran forma, al avanzar hasta la Serie Final, la cual perdieron ante León.
- El dominicano Juan Figueroa es el “as” de los Orientales. Figueroa tuvo balance adverso de 4-8 en Italia, pero fue líder en ponches con 92 en 77.1 entradas.
Para mala fortuna del Granada, Melvin Cuevas se lesionó y perdieron de momento un abridor probado. De modo que dependerán mucho de lo que pueda hacer Rodríguez.
En el bullpen hay poder, experiencia y juventud. Lo primero lo ofrece José Luis Sáenz y Carlos Estrella, con Álvaro López como el veterano del staff, más Denis Estrada y Gerald Rojas como chavalos que tendrán bastantes oportunidades.
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Este año parecen tener todos los ingredientes para mantenerse en los altos niveles, al contar con una sólida base de peloteros nacionales, a la espera de lo que puedan ofrece los importados.
A la ofensiva y la defensa, los Orientales lucen muy competentes.
Ofilio Castro, Justo Rivas, Ramón Flores, Renato Morales, Sandor Guido y Marlon Abea, junto a los extranjeros Olmo Rosario y Bobby Owens, le dan al equipo mucha peligrosidad con el madero.
Rosario trae buenas referencias y este año fue colíder de jonrones en la Liga de Italia. Ganó la triple corona de bateo en su equipo, Catania, con promedio de .318, seis jonrones y 28 empujadas. Este dominicano será el cuarto bate y alineará entre Ofilio y Justo.
Ofilio es el jugador más completo de nuestro país y Justo se ha establecido como uno de los bateadores más temibles. A ellos podemos agregar a Abea, quien, más allá de sus 40 años de edad, se mantiene en una gran forma física y sigue tronando. También se debe tomar en cuenta a Moncho Flores, quien está llamado a ser la chispa del equipo.
No obstante, el mánager Omar Cisneros tiene una incógnita que resolver.
Omar planea utilizar a Abea detrás del plato y al venezolano Apodaca como designado. Eso lo deja sin un receptor suplente.
Una solución que tiene el estratega es darle la titularidad del campo corto a Iván Marín, dejando a Rosario como designado, mientras Apodaca va al banco. Sin embargo, nadie trae a un extranjero para tenerlo sin jugar.
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