El presidente venezolano Hugo Chávez controlará a los Organismos No Gubernamentales (ONG) que se dedican a la promoción de la democracia en su país, tal como pretendió en Nicaragua en mayo de 2009 su homólogo Daniel Ortega.
La bancada oficialista venezolana aprobó una ley que limitará el financiamiento a las ONG.
El Nacional, de Caracas, publicó que la ley de Defensa de la Soberanía Política y Autodeterminación Nacional pretende “evitar la injerencia extranjera”.
El artículo uno dice: “Proteger el ejercicio de la soberanía política y la autodeterminación nacional de la injerencia extranjera, que mediante ayudas económicas o aportes financieros destinadas a organizaciones con fines políticos, dedicadas a la defensa de los derechos políticos o personas naturales que realicen actividades políticas, puedan atentar contra la estabilidad y funcionamiento de las instituciones de la República”.
La aprobación de la ley ocurre cuando la oposición venezolana denunció un “golpe de Estado” de Chávez.
En las últimas dos semanas, dice la agencia española Efe, la amplia mayoría oficialista en la Asamblea Nacional (AN) ha aprobado cerca de una veintena de leyes orgánicas además de una llamada Ley Habilitante.
La Ley Habilitante otorgó poderes especiales a Chávez para que legisle por decreto durante 18 meses, a menos de un mes de que asuma un nuevo Parlamento, elegido en septiembre pasado, en el cual el oficialismo mantendrá la mayoría de diputados “pero no los dos tercios requeridos para aprobar leyes orgánicas y poderes especiales al Ejecutivo”.
ORGANISMO PROTESTA
El director de Espacio Público, Carlos Correa, aseguró a El Nacional que esta ley busca dividir a la sociedad civil venezolana entre las organizaciones que serán catalogadas como políticas o no. Correa explicó que el objetivo es desaparecer a las ONG.
La ley plantea, según él, restricciones “claramente vinculadas a una doctrina que ve a organizaciones dedicadas a la observación del control, manejo y gestión de lo público como enemigas del Estado”.
“La generalización que aplica esta ley entre partidos políticos y organizaciones que manejan acciones de carácter social y de derechos humanos es absurda”, dijo Correa.
EL MANUAL DE ORTEGA
En mayo de 2009, el presidente Daniel Ortega quiso hacer lo mismo en Nicaragua.
De acuerdo con las publicaciones de entonces, el mandatario nicaragüense señaló a las organizaciones civiles de desestabilizar al Gobierno, un cuestionamiento que sigue haciendo en sus discursos.
El Ministerio de Gobernación (Migob) preparó un manual que se refería precisamente al uso y manejo de los fondos bajo administración de estas ONG.
Ese manual entonces establecía: “La contraparte nicaragüense (receptora de la cooperación) deben ser organizaciones legalmente constituidas en el país y que sus objetivos estén acordes con el rubro de la cooperación, debiéndose contemplar que los fondos no pueden ser destinados a actividades político-partidarias”.
MPN: “IGUAL ESTRATEGIA”
Violeta Granera, del Movimiento por Nicaragua (MPN), calificó anoche la nueva ley en Venezuela como un atentado a la libertad.
“Ellos (Ortega y Chávez) buscan un mismo objetivo de control sobre la ciudadanía”, dijo vía telefónica Granera.
“Lo que pasa es que esta ley es la legalización de toda una estrategia que ha venido siguiendo Chávez desde antes contra organizaciones. Aquí se iba a hacer a través de un manual, pero tengan la seguridad de que si el presidente Ortega tuviera la misma fuerza de Chávez en la Asamblea, lo hubiera hecho”, declaró.
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