LA PAZ/AFP
La marcha atrás en la noche de Año Nuevo en un draconiano aumento del precio de los combustibles en Bolivia fue percibida ayer como una derrota política del presidente Evo Morales y el error lo podrían pagar algunos ministros.
Morales firmó un decreto hace 9 días para subir los carburantes hasta en 83 por ciento, el más alto de la historia, y 5 días después tuvo que derogarlo tras violentas protestas sociales en sus bastiones electorales, como las ciudades de La Paz y su vecina El Alto y Cochabamba, que se saldaron con 15 heridos y 21 detenidos.
En una nueva muestra de la incertidumbre de la situación, el Gobierno señaló el domingo que sí subiría el precio de los combustibles, pero esta vez “en consulta con el pueblo”, según dijo el vicepresidente Álvaro García Linera.
Las críticas a la labor de varios ministros del presidente Morales afloraron ayer, tras las primeras evaluaciones de lo que ocurrió en la última semana. “Hubo un mal asesoramiento de parte de algunos ministros, su Gabinete le falló al Presidente”, afirmó la investigadora y docente universitaria Helena Argirakis, quien resaltó la equivocación que supuso hacer ese anuncio.
“(…)ha habido una animadversión innecesaria por parte del ministro que maneja el gabinete económico (Luis Arce) hacia el sector productivo”, señaló el presidente del poderoso gremio de empresarios privados Daniel Sánchez.
Desde la oposición las críticas se concentran en Arce y en el ministro de Hidrocarburos, Fernando Vincentti. “Por ética, los ministros de Hidrocarburos y de Economía en las próximas 24 horas deberían renunciar porque se ha confirmado el fracaso en el manejo de estos dos sectores”, dijo el diputado opositor Adrian Oliva.
Argirakis, cercana al oficialismo, también dijo que “tiene que haber cambios fuertes en el gabinete…”. Agregó que algunas autoridades “están con una actitud muy soberbia frente a la realidad”.
El oficialismo, intentando limitar el daño por todo este caótico episodio, está manejando un discurso en el cual señala que lo importante es que el mandatario escuchó al pueblo y por eso revirtió la medida.
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