Auxiliadora Rosales
El baño del bebé no solo debe significar higiene, sino también un momento de placer que disfrute a plenitud. Sin duda, pasar un rato todos los días sumergido en agua cálida relajante y refrescante será el tiempo ideal para un contacto especial entre la mamá y su hijo.
En esta labor de higiene las madres deben equiparse de productos de limpieza como champú y jabones suaves o neutros que contengan un pH de 5.5.
“El contenido en detergentes debe ser mínimo. Cuando hablamos de jabones neutros, nos referimos a jabones suaves, ya que la piel del bebé tiene un pH de 5.5 y estos jabones tiene el mismo pH. Es importante señalar que entre menos perfume y conservantes contenga, disminuye la posibilidad de irritar”, comenta la dermatóloga Tania Iris Aráuz Tinoco, de la Clínica Piel de Ángel.
Ella recomienda que el baño tiene que ser diario, con poco o nada de jabón, sin esponja o paste, ya que le añade fricción a la piel del bebé y contribuye a deteriorar la función de barrera cutánea.
“La temperatura del agua para el baño tiene que ser cálida para evitar que el pequeño sienta un cambio brusco de temperatura y, por ende, evitar que llore”.
A criterio de la dermatóloga de la Clínica Piel de Ángel los productos usados tienen que ser hipoalergénicos, sin colorantes y perfumes.
“Es importante conocer que ciertas sustancias químicas que les agregan a estos productos pueden provocar reacciones cutáneas al aplicarlas en la piel de los bebés y se debe tener cuidado”.
Entre los ingredientes que se deben evitar se encuentra el sodium dodecyl, que es un desengrasante industrial presente en el 98 por ciento de productos para el cuidado personal. Permanece en la piel por varios días alterando la función de barrera con desnaturalización de proteínas llevando a dañar la edema de la epidermis”.
El propilenglicol y polietilenglicol son sustancias anticongelantes y se utilizan en la fabricación de líquido de frenos. Disuelve la grasa y aceites, también es utilizada en la fabricación de cremas dentales, desodorantes y humectantes.
Otro es el triclosán, que es un pesticida y se sospecha que puede ser cancerígeno. También está el metilisothiazoline, sustancia utilizada para la elaboración de champús, asociada a casos de Alzheimer, alteraciones neurológicas y otros defectos. No están regulados por FDA (Administración de Alimentos y Medicamentos), por no ser medicamentos de prescripción.
Es importante que al finalizar el baño aplique crema o aceite para rehidratar la piel del bebé. “Aproveche ese momento para darle un suave masaje. Prefiera cremas que contengan petrolato sólido o líquido y evite las que contengan perfume o colorante en exceso. En las áreas con mayor descamación o resequedad puede aplicarse la misma crema varias veces durante el día”.
Evite aplicar cremas medicadas en la piel, sin ser indicadas por el pediatra o dermatólogo.
Si opta por usar colonia, que tenga poco alcohol y aplíquela sobre la ropa, no sobre el cuerpo ni la cabeza del bebé.
Asegúrese siempre de que el área de la piel anal esté en buen estado. “Si se ven zonas enrojecidas, aplique pasta protectora”, finaliza la especialista.
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