Gloria Picón Duarte
Arlen Jaqueline López es presidente del Consejo Electoral Municipal (CEM) de Totogalpa, acreditada por el Consejo Supremo Electoral (CSE) y según la Ley Electoral cuenta con funciones específicas como adoptar las medidas necesarias para el buen desarrollo y culminación de la elección en su jurisdicción. Sin embargo, afirma que debido a que sus funciones han sido usurpadas por el primer miembro sandinista del CEM solo le ha quedado el camino de convertirse en una observadora.
Otorgar las credenciales a los Fiscales de partidos o alianzas, acreditados en las JRV.
Dar a conocer a los ciudadanos, al inicio de la campaña electoral, la ubicación de la JRV.
Proceder de oficio o a petición de parte a sustituir a los miembros de la JRV nombrados por organizaciones políticas que no inscriban candidatos.
Adoptar las medidas necesarias para el buen desarrollo y culminación de la elección en su jurisdicción.
Recibir del CED y CER de su circunscripción todo el material electoral que corresponde a las JRV, así como su remisión.
Recibir de las JRV, para su envío al respectivo CED o CER todos los documentos y materiales usados durante las votaciones.
Garantizar que se transmitan los resultados electorales de las actas de escrutinio.
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La toma de posesión fue el pasado 24 de junio, pero López no ha tenido acceso a ningún tipo de información, documentación y ni siquiera a la oficina que le corresponde ya que la misma es ocupada por Cristian Hernández, primer miembro del CEM y miembro del Frente Sandinista, quien se ha encargado por la vía de hecho de todo lo concerniente a la administración y funcionamiento del CEM en su municipio.
López asegura que a diario llega al CEM donde tiene un escritorio solo para “calentar la silla”, ya que cuando ha querido ingresar al área de cedulación le han dicho y hasta le han puesto un letrero que dice “área restringida”. “No puedo entrar a ninguna oficina”, dice, pero asegura que no ha abandonado su puesto porque desde ahí puede por lo menos observar y denunciar lo que ocurre.
Entre lo que ha observado López están las reuniones que hace el primer miembro del CEM con los de la alcaldía, la gente de la casa de campaña del Frente Sandinista y con personas del Ministerio de Educación (Mined). También afirma que se está capacitando a los policías electorales a sus espaldas y los vehículos solo son para el primer miembro y sus allegados.
La amenaza con cárcel
López ya ha sido amenazada por exigir que la dejen desempeñar sus funcione. Expresó que Hernández una vez le dijo en una reunión que iba a “salir con las manos enchachadas” y que él se iba a dar el lujo de verla salir presa de ese Consejo. “Dijo que yo no tenía derecho a nada, porque el que manda es él”, asegura López, quien agrega que sus funciones han sido usurpadas por la vía de hecho ya que no hay un documento oficial que indique que es el primer miembro quien tiene toda las potestad para administrar el CEM.
Pese a las amenazas López asegura que va a mantenerse firme para que el voto de los ciudadanos sea respetado en su municipio. En las elecciones del 2008 una de las formas de concretar el fraude según el informe del Instituto para el Desarrollo de la Democracia (Ipade) fue anular gran cantidad de votos por la vía de la impugnación pero en los CEM y no en las JRV como manda la ley.
Según López la población está animada en ir a votar, porque ven que es demasiado lo que está pasando. “Ellos confían que yo voy a hacer algo, tienen esa fe y esperanza y creen que hasta cierto punto va a haber transparencia, porque tendremos presidentes y primeros miembros en las JRV, además la gente está preparada para defender el voto”, manifiesta López, quien asegura que dentro de la estructura electoral en Totogalpa, la ventaja del orteguismo es de 15 a uno.
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