Juan Vega González (*)
El éxito de una organización que depende del alineamiento de intereses o motivaciones del equipo directivo, gerencial y de empleados de la misma. Precisa lograr una visión compartida sobre qué producir, cómo motivar y cómo llegar a ser un equipo unido por un propósito común.
1. Qué producir: Desarrolle una estrategia que dé sentido y significado a sus colaboradores, les permita abrir nuevos mercados, aprovechar oportunidades que hagan sentido o provean valor para los clientes y significado (sentimiento de lograr algo valioso) para sus empleados.
El qué producir viene acompañado del cuánto y con qué calidad, para lo cual necesita definir metas claras e indicadores esperados de productividad, que sean asignados y conocidos por cada uno de sus colaboradores y medidos por los supervisores.
2. Cómo motivar: Antes de lograr clientes satisfechos, precisa ocuparse de lograr empleados satisfechos y motivados.
Colaboradores motivados tratan bien y atienden rápidamente a sus clientes, lo que a su vez le genera mayor fidelidad de clientes y menor pérdida de empleados.
La capacidad de influencia de los líderes es fundamental para: a) crear una identidad compartida, un sentido de pertenencia (compromiso de cada colaborador con el grupo); y b) lograr una interpretación común de qué es lo que se quiere lograr (visión compartida).
Se lidera con el ejemplo, con una buena comunicación en doble vía orientada a un propósito común. Escuche y tome en cuenta las sugerencias y opiniones de sus colaboradores.
La motivación puede y debe medirse, considere indicadores de satisfacción de clientes, satisfacción de empleados, pérdida de clientes y empleados. Encuentre las razones por las cuales la gente deja de trabajar con usted e introduzca medidas correctivas necesarias.
3. Equipo unido: se trata de transformar acciones individuales en poder colectivo con un propósito común. Un equipo de individuos con interés, deseo y motivación de unir esfuerzos en una misma dirección.
El liderazgo permite crear un compromiso real, donde el aporte de todos los individuos genera un equipo más inteligente, astuto y fuerte que cada persona trabajando aisladamente. Incentivos y sanciones juegan un papel poderoso en la cohesión y efectividad de sus colaboradores.
Liderazgo comprometido, incentivos o sanciones, buena comunicación (mensajes cortos con un propósito claro), acompañados de procesos educativos que formen su capital humano y mejoren procesos de producción y venta, son fundamentales para lograr la unión y fuerza de su equipo.
(*) Director Promifin [email protected]
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