14
días
han pasado desde el robo de nuestras instalaciones. No nos rendimos, seguimos comprometidos con informarte.
SUSCRIBITE PARA QUE PODAMOS SEGUIR INFORMANDO.
Cristiana Chamorro

PAC, poeta y periodista en LA PRENSA

PAC, lo llamaron los intelectuales, nosotros Rey le decíamos en LA PRENSA porque lo sentimos siempre algo así como lo que dijo Amado Nervo de Rubén Darío: “Padre, hermano y mágico, liróforo celeste”. Desde pequeños seguimos su historia encantados con su palabra producida con una humildad contagiante. “Decir humilde, es decir humanista”, dijo una vez PAC en un Escrito a Máquina . No lo dijo para hablar de sí mismo, porque eso no iba con el poeta, sino proponer el deber ser de los nicaragüenses, en el profundo sentido de su significado que decía viene de “humus” y significa que somos hechos de tierra, de geografía, historia, paisaje y tradición.

Con esa hechura granadina cargada de proyectos llegó a LA PRENSA casi al mismo tiempo que mi padre, Pedro Joaquín Chamorro Cardenal, en los años cuarenta. Nuestro periódico creció y se hizo bajo esa relación fraterna entre PAC y PJChC. A la hora de nuestras angustias y éxitos, la figura familiar del “Rey” humilde de LA PRENSA estaba presente con sus consejos y, cuando fue necesario tomando sin vacilar el peligroso timón del Diario en los azares de la persecución de sus tiempos. Por eso, cuando acongojado frente al cadáver de mi padre, PAC escribió: “Ahora todos seremos Pedro”, nos sentimos seguros con el poeta capitán.

Sin embargo, para PAC no ha de haber sido nada fácil y así lo confesó cuando le preguntaron el Día del Periodista, en la introducción de su libro El Nicaragüense : Si sentía algún antagonismo entre hacer periodismo y poesía; ¿si esos dos oficios creadores se entorpecían o ayudaban mutuamente? Por encima de todo el codirector de LA PRENSA era poeta, pero también compartía plenamente con mi padre el proyecto de que “Nicaragua vuelva a ser República”, una lucha que para PAC era también una forma de hacer poesía.

Con la determinación de trabajar juntos por las libertades de Nicaragua el poeta-periodista nos dio cátedra de periodismo en sus Escritos a Máquina , ensayos, titulares que hicieron historia y ediciones completas de LA PRENSA junto con la famosa Literaria, “Universidad de bolsillo” que rompió fronteras con La Prensa Literaria Centroamericana, un éxito sorprendente quizás porque en su objetivo de crear cultura y civilización hizo también negocio.

Pero es en su artículo El Escritor y el Periodista (1967), que PAC explica como logra conciliar esa doble dimensión contradictoria de poeta-periodista en su obra creativa. Estaba consciente que el periodismo se hace con la actualidad y lo inmediato. Reconocía que son sus materiales de construcción y su texto diario el suceso. Acepta que este recurso impone velocidad y en la rapidez del enfoque se cae en la superficialidad que advierte es el vicio del periodismo.

Para PAC la cultura no comenzaba con el acercamiento de las cosas, sino con el distanciamiento de ellas que dice es donde se encuentra la libertad del movimiento intelectual. Así se explica la profundidad de sus Escritos a Máquina distanciados del suceso inmediato, pero rescatando lo que los hechos tenían de perenne y permanente, que son los otros materiales de construcción del escritor.

PAC con orgullo nos dice que su lado de poeta siempre le ganó la batalla a su otra cara, la de también ser periodista. Sin embargo, aclara que su vocación de escritor no logra imponerse sobre su misión periodística, porque el periodismo le servía de calistenia, como una excelente práctica intelectual de perspicacia y rapidez, la escuela que tuvo para educar su atención sobre los problemas humanos que dominaron el centro de su pensamiento.

Resuelta esa lucha interna que PAC confiesa le producía un “desgarramiento constante”, logró ver realizada su obra creativa de periodista en la otra República, en la de “papel”, a como el poeta bautizó LA PRENSA en 1973. Se refería a la sociedad democrática sentada alrededor de una gran mesa redonda que son los medios de comunicación donde los ciudadanos iguales ante la Ley intercambian sus hechos y opiniones.

Junto a mi padre abrió esa República de Papel a poetas emergentes, al arte, a la creación de toda la cultura y civilización democrática asediada pero, con refugio en los reportajes de LA PRENSA de puertas abiertas a los desesperados reclamos ciudadanos escritos sobre un papel blanco haciendo historia. Construyeron esa República en contraposición al poder de entonces, el Estado somocista que PAC califica de “feudal”.

Lo sorprendente es que describe el somocismo como si estuviera frente al poder gobernante de la Nicaragua de hoy: “No escuchan, no dialogan; viven de los comunicados y decretos, órdenes en las que solo cuenta una voluntad, la de arriba, sin comunicación con el pueblo”. Para el poeta-periodista la libertad es dialogante, no es sorda. Hay libertad verdadera donde se oye la palabra decía con humildad campesina y con sabiduría de “rey” profeta advierte: “El inmenso motor del poder sin frenos acabará arrollándolos también a ellos”.  

La autora es periodista.

 

Opinión LA PRENSA PAC periodista Poeta archivo

COMENTARIOS

  1. un lector
    Hace 11 años

    no me hagan reir. ppac era un oligarco, facistoide camisa parda que nno hizo nada por nicarragua solo escriibir sandeces y admirado por un cuirculoo de burguueses que no sabenn como el campeesino vive con el sudor de la frente.

×

El contenido de LA PRENSA es el resultado de mucho esfuerzo. Te invitamos a compartirlo y así contribuís a mantener vivo el periodismo independiente en Nicaragua.

Comparte nuestro enlace:

Si aún no sos suscriptor, te invitamos a suscribirte aquí