RAMÓN VILLARREAL/MARTHA VÁSQUEZ
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Mientras el caso de la juez Gertrudis Arias la Corte Suprema de Justicia lo ha manejado públicamente, como modelo de aplicación disciplinaria por otorgar arresto domiciliar efímero a cinco procesados por narcotráfico, el caso de los magistrados de la Sala Penal de la Corte, que otorgaron libertad a un condenado por transporte de droga y de oficio absolvieron a cinco del delito de crimen organizado, se maneja en silencio.
El beneficiado en octubre pasado fue Gilbert Vanegas Vargas, condenado a diez años de cárcel por transporte interno de droga; pero su abogado Giovanny Ruiz Mena no ha logrado hacer efectiva la orden de libertad y procederá penalmente contra la juez de ejecución de sentencia de Rivas, Margarita Vanegas.
“Los delitos en que la juez está incurriendo son desobediencia y desacato a la autoridad, denegación de justicia y retardo malicioso”, detalló Ruiz.
Vanegas Vargas fue procesado junto con cinco personas más por crimen organizado, transporte de droga y uso ilegal de armas restringidas.
Estos habían sido beneficiados con rebajas de pena en la famosa sentencia número 40 del Tribunal de Apelaciones de Granada, emitida en diciembre del 2010.
DESTITUIDOS
Cabe recordar que por esta sentencia fueron destituidos los magistrados Julia Selva, Ligia Rivas y Alejandro Estrada.
Los absueltos por crimen organizado son: Jorge Jáenz Pérez, Juan Carlos Pineda Orozco, Carlos Enrique Sizar Robles, Miguel Ángel Jáenz Jáenz, Carlos Javier Corea Espinoza y Guillermo Ruiz Martínez. De esta forma la pena se les redujo de 17 y 19 años a solo 10 años de cárcel. Además mandan a entregar los bienes decomisados a “terceros de buena fe”.
El abogado Ruiz dijo que su representado Vanegas tiene cuatro meses de detención ilegal y que no ha podido recuperar su libertad a pesar que ya recurrió por detención ilegal ante el Tribunal de Granada, donde asignaron un juez ejecutor.
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