ELBA CRISTINA PARRALES
No es preciso que nos cuenten un chiste para aprovechar todas las situaciones que puedan provocarnos al menos una sonrisa.
Ya sea por puro placer, por imágenes divertidas, por gesticulaciones cómicas, ocurrencias de amigos o simplemente para saludar, reír proporciona muchos beneficios a nuestro organismo, sobre todo si lo haces de verdad y la mayor cantidad de veces posibles al día.
Según los especialistas, aunque reír no soluciona los problemas, sí ayuda en gran medida a liberar el estrés y a tener buen humor. Esto hace que la persona pueda ser más creativa y busque las soluciones más viables a sus problemas.
La psicóloga Carla Caballero asegura que reír no solo estimula el bienestar emocional, pues se ha comprobado a través de diversos estudios que ayuda a que la persona se mantenga saludable.
Reír a carcajadas no es asunto de niños. Ellos gozan a plenitud las situaciones que les agradan y lo expresan libremente. Caballero afirma que en la medida que la persona va creciendo, también va adquiriendo más responsabilidades y tareas. Esto muchas veces provoca ansiedad y estrés, lo cual conlleva a que las personas consideren que no tienen motivos para reírse.
“El estrés enferma porque debilita el sistema inmunológico y desencadena enfermedades gastrointestinales, mientras que la risa produce todo lo contrario, debido a que el ejercicio de reír relaja los músculos faciales y del abdomen”, explica el médico Tomás Roque.
Por lo antes citado, la psicóloga Caballero recomienda que pese a los problemas es bueno que las personas busquen temas o amistades con quienes puedan compartir anécdotas, ya que esto estimula el estado de ánimo positivo.
Comparte sonrisas
La psicóloga Carla Caballero refiere que la risa favorece en gran medida a tener buen humor, lo cual fortalece las relaciones sociales y mejora la calidad de vida.
“Está comprobado que una persona seria, que no comparte momentos de relajación, tiene menos amistades y los problemas los engrandece. La amabilidad está estrechamente relacionada con la sonrisa sincera, con la solidaridad y el cariño”, asegura.
Cuando una persona está de buen humor, tiende a interactuar con otras personas y es más amable. Asimismo, transmite buena energía y simpatía. La ventaja más importante es que hay una tendencia a sentir mayor agrado por uno mismo.
La risa y la salud
El médico Tomás Roque afirma que reír libera sustancias en el cerebro que son beneficiosas para la salud mental y física.
Entre estas, explica, están la dopamina, relacionada con los estados de bienestar psicológico, y la endorfina, que provoca euforia y a la vez funciona como analgésico.
“Los estudios sobre los beneficios de la risa que se han elaborado en Estados Unidos y otros países revelan que reírse ayuda a curar la angustia y la depresión. Pero además mejora la oxigenación del cerebro y del cuerpo en general y relaja los músculos que están tensos”, explica.
Reír a carcajadas es saludable, ya que ayuda a tener un sueño reparador y es efectiva contra el insomnio. Reír hasta que “duelan” los músculos del estómago también lo es, porque es como si se estuviera realizando un entrenamiento cardiovascular.
“Al reír se realiza una mezcla de inhalación y exhalación. Esto hace que la persona respire profundamente, aportando un nuevo oxígeno a los pulmones, al cerebro y al cuerpo”, dice Roque.
Reír es como un masaje interno que se expresa externamente proporcionando múltiples beneficios, así que cada vez que se sienta decaído recurra a la risa que es muy placentera.
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