Sin embargo, Gutiérrez expresó que MPeso está actuando como un recaudador y que no se quedará con el IVA que cobre por la venta de cada tarjeta, una vez que concluya la entrega gratuita de tarjetas electrónicas, sino que lo regresará a las arcas de la DGI.
“Si realmente se debe o no se debe cobrar IVA por ese servicio yo quisiera que fuera la Dirección General de Ingresos, que es el ente recaudador y especializado en este país, para que lo defina”, expresó el legislador.
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Wendy Álvarez y Roy Moncada
El cobro del Impuesto sobre el Valor Agregado (IVA) que la empresa MPeso pretende aplicar a las tarjetas del Transporte Urbano Colectivo (TUC) es ilegal y viola la Ley de Concertación Tributaria, que exime de ese impuesto al transporte nacional interno, así como a este tipo de moneda electrónica, advirtieron ayer expertos fiscales.
Tal es la violación, que de no derogarse esa tasa impositiva, también la Dirección General de Ingresos (DGI) estaría cometiendo el delito de exacción, contemplado en el artículo 455 del Código Penal de Nicaragua, según expertos.
El experto fiscal Julio Francisco Báez dice que el director del Fisco se estaría exponiendo a una sanción carcelaria, porque la exacción se castiga con dos a seis años de prisión por el cobro de “tarifas, aranceles, impuestos, contribuciones, tasas o gravámenes inexistentes o en mayor cantidad a la que señala la ley”.
Báez explica que si bien MPeso es una entidad regulada por la Superintendencia de Bancos y Otras Instituciones Financieras (Siboif) y por tanto la tarjeta es una moneda electrónica o de débito, entonces este título valor está libre del pago del IVA, según el artículo 127 numeral 24 de la Ley de Concertación Tributaria referida a Exenciones objetivas.
De hecho, Haroldo Montealegre Sansón, gerente de MPeso, dijo ayer a LA PRENSA que esperan que se elimine el IVA a la tarjeta recargable, para que el usuario del transporte capitalino pague solo los 50 córdobas.
“Vamos a ver si exoneran del IVA la tarjeta”, respondió Montealegre vía mensaje de texto, quien recordó que la gratuidad de la tarjeta se mantendrá hasta el 23 de agosto.
A inicios del año Francisco Alvarado, director del Instituto Regulador del Transporte Municipal de Managua (Irtramma), informó que la tarjeta recargable tendría un valor de 50 córdobas, pero este sábado 17 de agosto MPeso difundió un comunicado a través de la red social de Twitter, donde exponía que el costo ahora iba a ser de 57.50 córdobas, por el cobro del IVA.
TRANSPORTE PÚBLICO ESTÁ EXENTO DE IMPUESTO
El experto fiscal Silvio Bendaña va más allá, y recuerda que el artículo 136, Sección IV numeral 5 es claro en señalar que están exentos del traslado del IVA el “transporte interno aéreo, terrestre, lacustre, fluvial y marítimo…”.
Incluso, el artículo 95, numeral cuatro del reglamento de la Ley Fiscal ratifica esa exención.
Recuerda que si bien a lo que se le está cobrando el IVA es a la tarjeta, la compra de esta no es voluntaria sino obligatoria y por tanto forma parte del transporte público, que goza del beneficio fiscal antes mencionado.
Báez y Bendaña llamaron a la población a denunciar dicho cobro ante los entes reguladores correspondientes, en este caso la Dirección de Defensa del Consumidor del Ministerio de Fomento, Industria y Comercio (Mific).
El director del Instituto de Defensa de los Consumidores, Marvin Pomares, dijo que efectivamente la tarde de ayer estaban enviando a la DGI una carta solicitando la eliminación de ese impuesto por ser ilegal.
DESBORDE DE USUARIOS POR TARJETAS GRATUITAS
Por otra parte los únicos cuatro centros de atención que tiene la empresa MPeso en Managua estuvieron saturados ayer, después que las autoridades del transporte capitalino dieron “luz verde” para la continuación de entregas de tarjetas gratis.
Para obtener la tarjeta, a mediodía personas como Miguel Polanco tuvieron que llegar de madrugada a los centros.
Este martes, mientras miles de personas realizaban filas para la tarjeta, en los buses empezaba a funcionar el sistema.
Montealegre Sansón afirmó que el sistema estaba respondiendo cerca del noventa por ciento.
(Colaboración de Vladimir Vásquez).
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