Ramón Villarreal Bello
Como un balde de agua fría cayó la decisión de un jurado de conciencia que declaró no culpable a José Luis Obando Pérez, acusado de lesiones agravadas en perjuicio del canadiense Jordan Ryan Allan, al cual le lesionaron el rostro con una botella de vidrio, heridas que ameritaron más de veinte puntadas.
Reyna Triguero, presidenta de Cantur de San Juan del Sur, lamentó que el poder judicial deje en manos de jurados casos relevantes, que quedan en la impunidad y dan mala imagen.
Dijo que a pesar que este es el primer caso (de un delito contra un turista extranjero) que llega hasta juicio y que no se ha castigado al culpable, “en San Juan del Sur los empresarios no vamos a bajar la guardia, y seguiremos vigilantes y hombro a hombro apoyando a la Policía, para que San Juan del Sur sea un destino turístico sano y seguro”.
Rosibel Cerda Morales, administradora del Hotel La Estación y el restaurante El Buen Gusto, dijo sentirse decepcionada. “Estaba a la vista y todo claro, había pruebas, ahora solo queda esperar que se nos sigan yendo los turistas de Nicaragua”, lamentó.
Erick Cabezas, abogado defensor de Obando Pérez, dijo que la prueba era escueta. “Creo que el jurado sabiamente decidió dejarlo libre, porque la presunción de inocencia que a él lo cobija constitucionalmente nunca fue violentada”, manifestó.
Dionisio Parrales, fiscal auxiliar, señaló que desde que deciden acusar es porque hay elementos e indicios suficientes de prueba contra el acusado.
Adujo que hay falta de conciencia de justicia en los tribunales de jurado. “Existen una cantidad de delitos que son vistos por tribunal de jurado y es en ellos donde se tiene una sensación de impunidad, el pueblo rivense cree que hay impunidad, pero cuando son llamados a integrar los tribunales de jurados no demuestran ese deseo de justicia”, argumentó.
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