Martha Vásquez
La empleada del Ineter, Tosca Altamirano, se valía de su puesto para apropiarse de planos y fotos satelitales de propiedades estatales que interesaban a los clientes de la empresa que creó junto con Tupac Aguilar y luego la ofrecían a sus clientes, según la acusación del Ministerio Público.
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Tosca Alexandra Altamirano y Tupac Amaru Aguilar son acusados por la Fiscalía porque, supuestamente, accedieron a información pública reservada del Instituto Nicaragüense de Estudios Territoriales (Ineter). Además, son señalados de revelar, divulgar y aprovechar la información filtrada para fines privados.
De acuerdo con la acusación ventilada en el Juzgado Quinto Distrito Penal de Audiencia, Altamirano trabajaba como empleada del Ineter, de donde supuestamente sustrajo información técnica catastral —como archivos de mapas en los que aparecen propiedades del Estado, certificaciones, escrituras de propiedades con potencial minero— y se la entregó a Aguilar, quien es topógrafo privado y exempleado de la misma institución.
La información era transmitida a través de correo electrónico personal, utilizando las computadoras del Ineter. Aguilar, a su vez, facilitaba la información suministrada por la empleada del Ineter a particulares, según la acusación.
Las defensas de los acusados argumentaron que Tupac Aguilar no es trabajador del Estado y no calzaba en el delito que la Fiscalía imputa. Además, no menciona cuáles son los beneficios o provechos que sacó el señalado.
Respecto a la medida cautelar, el Ministerio Público pidió prisión preventiva para ambos por tratarse de información reservada del Estado. Sin embargo, los abogados defensores dijeron que esa medida era demasiado drástica, pues los acusados no son personas peligrosas, por tanto era desproporcional.
El juez Arias admitió la acusación y ordenó la prisión preventiva por ser un delito grave y programó la audiencia inicial para el 13 de septiembre.
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