Lucía Navas y Mabel Calero
El ejercicio fue tensar las captaciones del público de la banca durante diez días, siendo el resultado que la pérdida máxima sería del 2.6 por ciento de los depósitos, lo cual no afectaría grandemente la cobertura de liquidez inmediata del Sistema Financiero Nacional. Para el BCN las condiciones de fondeo de la banca son suficientes para afrontar escenarios de estrés en las captaciones del público.
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Las autoridades del Banco Central de Nicaragua (BCN) persisten en no revisar la política cambiaria del córdoba frente al dólar con el fin de reducir el porcentaje de la tasa del cinco por ciento anual, pese a que la misma entidad recomienda a los bancos “mantener controlado el comportamiento” del deslizamiento de la moneda nacional.
En el Informe de Estabilidad Financiera a noviembre de 2013, publicado ayer por el BCN, se expresa preocupación por observarse hasta agosto pasado “una alta exposición de riesgo cambiario, donde el capital está expuesto a las fluctuaciones de la moneda nacional respecto al dólar”.
De hecho los últimos meses el córdoba ha perdido valor frente al dólar con rapidez y se muestra en que la tasa de cambio oficial del período fijado por el BCN para el presente año es de 25.3317 córdobas por un dólar, pero en el Sistema Financiero Nacional, esa tasa se superó desde julio pasado. Actualmente en los bancos comerciales un dólar cuesta entre 25.47 y 25.50 córdobas.
NO TODAVÍA
Pero Ovidio Reyes, gerente general del BCN, descartó un cambio de la política cambiaria y monetaria y defiende su objetivo.
“Creemos que la tasa de deslizamiento está funcionando bien porque cuanto ancla expectativas de inflación en un seis y medio y un siete por ciento y además facilita el movimiento de los precios y que las exportaciones no sufran de un presado cambiario”, respondió Reyes a LA PRENSA ayer en Carazo, donde presentó las previsiones económicas del año.
La razón técnica de Reyes para no cambiar en este momento la política de deslizamiento de la moneda es porque “está promoviendo el ahorro y los créditos” en el Sistema Financiero, los cuales “han crecido un 13 por ciento y un 22 por ciento” respectivamente en el año.
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