“Solo pienso en el sacrificio y la entrega total del equipo. No puedo jugar lindo mientras el grupo no recupere las ansias y el amor dentro de la cancha por una camiseta. Pido compromiso y profesionalismo”, resume el presente y futuro del Diriangén, Roberto Chanampe, nuevo técnico del club tras la salida de Florencio Leiva en la segunda fecha del Torneo de Apertura de Primera División.
El entrenador sudamericano aseguró que su nombramiento no se lo esperaba en las actuales circunstancias y que tomarlo es un arma de doble filo. “
La actitud de ayer (hoy) fue muy positiva y espero que sigua así, pero las cosas están muy delicadas, hay un vestuario divido entre extranjeros, nacionales que tienen años acá y gente nueva. No hay un líder, sino uno por grupo”, señala.
¿Cómo se cambia eso? “Serles sinceros a los jugadores y hacerles saber que el que quiera estar acá va a trabajar para un equipo, tiene un compromiso, un contrato, una camiseta puesta y tiene que ser profesional. Con diferencia y mala actitud no llegarán a ningún lado y la puerta del estadio va estar abierta para irse tranquilamente”, explica.
“Les dejé claro que en este club pasaron grandes jugadores, que tiene historia la camiseta y que son privilegiados por vestirla, no la pueden vestir así por así”, expuso Chanampe, quien iba por la segunda temporada en la Juvenil Especial.
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