Emiliano Chamorro
“El caudillismo en Nicaragua no permite el relevo generacional y los jóvenes debemos impulsar el cambio”, asegura la joven abogada Tamara Ruiz, quien coordinó, junto con sacerdotes de la Diócesis de Jinotega, un diplomado sobre formación política, jurídica, social y justicia a más de ochenta jóvenes de comunidades del departamento de Jinotega. El diplomado se llevó a cabo los días 13 y 14 de agosto.
Ruiz exhortó a los jóvenes a que no tengan miedo a participar en política y defender sus derechos constitucionales.
Martha Pérez, también tutora del diplomado, dijo que ya es tiempo que la juventud nicaragüense deje de ser conformista e indiferente ante la realidad nacional.
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El obispo de Jinotega, monseñor Carlos Enrique Herrera, invitó a los jóvenes a que no sean indiferentes con las realidades del país, recordándoles que se necesita una generación de jóvenes honestos, trabajadores y educados para desarrollar el país.
“No tengan miedo de participar por el bien de sus comunidades, de participar en política. Debemos prepararnos para el cambio y ese cambio está en sus manos, pero sí necesitamos una generación de líderes honestos y capaces de transformar y desarrollar Nicaragua”, exhortó Herrera, quien también es el responsable del Departamento de Juventud de la Conferencia Episcopal de Nicaragua.
Herrera llamo a los jóvenes a ser valientes y que siempre sus actuaciones sean para defender los valores y la dignidad humana.
“Participen siempre con honestidad y ética, ya sea en la política, en lo social. Asuman retos con responsabilidad y recuerden siempre que Jesús es nuestro gran ejemplo para que seamos buenos seres humanos convirtiéndonos en gente de bien”, afirmó monseñor Herrera.
El padre Uriel Vallejos, director de Cáritas de Jinotega, llamó a los jóvenes a no temer a los líderes con vocación dictatorial porque la juventud es el presente y autora de una mejor sociedad.
“Ustedes, jóvenes, están llamados a que nuestra sociedad tenga nuevos líderes que estén formados en valores políticos, sociales, éticos y espirituales. No tengan miedo”, expresó el sacerdote.
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