Amalia del Cid y Melissa Aguilera
Un equipo de científicos rusos, especializados en geodesia, geofísica y dinámica, empezó este viernes la valoración del riesgo sísmico y la capacidad de resistencia de algunas infraestructuras públicas.
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Al terminar la misión, uno de los instrumentos rusos será donado a Nicaragua, dijo Norman Ernesto Mora, funcionario del Sinapred.
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En conjunto con especialistas nicaragüenses, los rusos estudiarán 16 edificios en Managua y siete en el departamento de León (seis en la cabecera departamental y uno en La Paz Centro), informó el teniente coronel Eduardo Saballos, de Defensa Civil del Ejército Nacional, a través de medios del Gobierno. Pero no precisó cuáles estructuras serán evaluadas.
La tecnología de los rusos permitirá medir la amenaza sísmica y el tipo de suelo en el que están situados los edificios, así como su refuerzo metálico y el nivel de deterioro de las estructuras de concreto. Eso aseguró Norman Ernesto Mora, funcionario del Sistema Nacional para la Prevención, Mitigación y Atención de Desastres (Sinapred).
Sismos
Mientras tanto, hay una nueva “alarma” en el Instituto Nicaragüense de Estudios Territoriales (Ineter). Ahora la institución tiene la mirada puesta en un enjambre sísmico localizado en Estero Real, Chinandega, entre el volcán San Cristóbal y el volcán Cosigüina.
Desde las 10:00 de la noche del viernes hasta la 6:57 de la mañana de este sábado ocurrieron cinco sismos en esa zona. El más fuerte tuvo una intensidad de 3.7 grados en la escala de Richter y se localizó a 15 kilómetros de profundidad, de acuerdo con el monitoreo del Ineter.
Hace algunas semanas ya se habían reportado temblores con magnitudes superiores a los cuatro grados y ahora “la actividad sísmica se ha retomado”, informó ayer, en conferencia de prensa, Wilfried Strauch, experto de esta institución. Y advirtió que aunque hasta el momento las magnitudes de los sismos recientes “no van a más de 3.7 grados”, estas pueden aumentar.
Esta es una situación “similar” a la que ocurrió hace cuatro días, cuando se registró un “enjambre sísmico inusual” en el lago de Managua, cerca de Acahualinca, dijo Strauch.
Según el experto, un movimiento mayor ocasionaría daños materiales y quienes viven en la zona deben cuidarse.
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