José Garth Medina
El grisi siknis o histeria colectiva sigue en aumento en las comunidades indígenas del territorio Mayangna Sauni As, en el municipio de Bonanza, Caribe Norte, donde ya hay 108 afectados, confirmó Emilio Bruno, presidente del Gobierno Territorial Mayangna Sauni As.
Una comisión interinstitucional se prepara para ingresar hoy a la comunidad de Alal ubicada a 25 kilómetros de la cabecera municipal de Bonanza, y además llevan pastores para que ayuden a resolver el problema.
El grupo de tres médicos tradicionales que trabajan con el Instituto de Medicina Tradicional de Uraccan ya está en Bonanza, pero no pueden entrar sin agua florida que solo se encuentra en la ciudad de Puerto Cabezas.
“Estamos esperando 130 docenas de (vasos de) agua florida desde Puerto Cabezas y también vamos a llevar unos pastores para que nos ayuden en la comunidad”, comento el líder indígena.
En Alal se mantienen los 82 casos, seis en Panyawas, ocho en Betlehem y 12 en Musawas, lo que ha causado preocupación a las autoridades comunitarias, territoriales y municipales.
El grisi Siknis es una enfermedad que según los expertos tiene que ver con la posesión de los espíritus y se apodera del cuerpo. Solamente se puede tratar con exorcismo según Avelino Cox, historiador costeño.
En tanto, Serafina Espinoza, del Instituto de Medicina Tradicional de Uraccan, señaló que los médicos tradicionales que trabajan con ellos son los que han logrado estabilizar a la población afectada en años anteriores en otros municipios del Caribe.
Ver en la versión impresa las páginas: 8 A