Mabel Calero
La población de La Conquista se enfrenta a la peor situación de escasez de agua y hasta el momento se contabilizan 28 pozos y ocho ríos abastecedores que están secos. Solo en el casco urbano hay servicio de agua potable, mientras unas 40 comunidades se abastecen de pozos.
Aunque la escasez no es reciente, el problema ha sido la sequía que ha afectado a los afluentes que abastecían a las comunidades.
“El hambre ha llegado a nuestra mesa, antes teníamos los frijolitos pero ahora compramos los frijoles, entonces al día hay familias que solo hacen un tiempo, porque no hay que comer, antes tenían la vaquita, le sacaban leche, pero ahora no hay vacas porque no hay agua”, dijo Alberto Umaña, de la comunidad Ochomogo.
“Estamos tomando agua del río el Tigris, ahí sacamos para el consumo y ahí lavamos y nos bañamos, el agua no sale como en el chorro, tiene un color oscuro, pero es agua normal, ya tenemos rato de tomar esa agua y gracias a Dios no nos ha hecho daño”, comentó Cándida Morales, de Ochomogo.
Explicó que la preocupación es que el río se seque, pues este año con la sequía perdió su caudal y ahora solo queda un charco.
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