La activista cubana Miriam Leiva, cofundadora de las Damas de Blanco, llevará este martes a la primera audiencia del Congreso de Estados Unidos sobre Cuba la voz del “pueblo cubano que está contento y esperanzado” con el deshielo de las relaciones entre la isla y EE.UU.
Leiva, exfuncionaria del Gobierno cubano, declarará en la primera audiencia que celebrará el Congreso sobre la normalización de las relaciones con Cuba, que estará presidida por el senador republicano Marco Rubio, uno de los más beligerantes con el Gobierno de Raúl Castro.
“Espero que el Senado escuche las opiniones de un pensamiento que, desde Cuba, representa las aspiraciones del pueblo cubano que está contento y esperanzado con las nuevas medidas”, expresó Leiva en un encuentro informativo en Washington, un día antes de su declaración ante el Congreso.
Leiva manifestó el deseo de la disidencia moderada, favorable al acercamiento entre ambos países, que espera “contribuir” para terminar los 56 años de una política de aislamiento que, a su juicio, solo ha beneficiado al Gobierno cubano.
La activista estuvo casada con el periodista y economista óscar Espinosa, fallecido hace dos años y uno de los 75 opositores condenados a prisión durante la “Primavera Negra” de 2003 en Cuba por sus críticas a las reformas del Gobierno, que consideraba limitadas.
Comparecerá en el Senado como testigo junto a Rosa María Payá, hija del disidente cubano fallecido Oswaldo Payá, y el secretario de Estado adjunto para Democracia, Derechos Humanos y Trabajo de EEUU, Tom Malinowski.
También expresará su opinión la secretaria de Estado adjunta de EEUU para Latinoamérica, Roberta Jacobson, que encabezó la delegación del Gobierno norteamericano que viajó a Cuba este mes para la primera toma de contacto en las negociaciones con La Habana.
La oficina del senador Marco Rubio dio hoy a conocer en un comunicado la asistencia de Leiva, así como de la líder de las Damas de Blanco, Berta Soler, y del disidente Manuel Cuesta Morúa, líder del grupo Arco Progresista.
Rubio, posible candidato a la Presidencia de Estados Unidos en 2016, se estrenará mañana con esta audiencia como presidente del subcomité para asuntos del Hemisferio Occidental, Crimen Trasnacional, Seguridad Civil, Democracia, Derechos Humanos y Asuntos Mundiales de la Mujer.
Durante el encuentro informativo, Leiva criticó la actitud beligerante del senador, quien hoy en un artículo de opinión en la cadena CNN recordó una de las escenas de “El Padrino II”, en la que Michael Corleone responde a las peticiones de un senador estadounidense diciendo: “Mi oferta es esta: nada”.
Esa es la actitud que, a juicio de Rubio, ha adoptado el régimen castrista, que no ha cambiado “nada” desde que la normalización de las relaciones diplomáticas entre ambos países el pasado diciembre.
Sin embargo, Leiva cree que Rubio y otros congresistas estadounidenses que mantienen posturas similares “deberían de conocer mejor lo que sucede en Cuba” antes de hacer declaraciones como la anterior.
“Tengo mucho respeto por ellos, pero no saben lo que está pasando en Cuba. Tienen una posición que no ayuda a la democracia ni a la libertad. Creo que están equivocados y tienen que oír con la mente abierta a la otra oposición, que tiene otros argumentos”, subrayó.
A las críticas contra Rubio se sumó el director ejecutivo del Grupo de Estudio de Cuba, Tomás Bilbao, quien considera que “es muy difícil tener una buena perspectiva del Gobierno de Cuba si nunca se ha viajado a la isla”.
“Va a ser muy interesante ver si los colegas del senador Rubio están todos alineados en apoyo a esta postura o si, al igual que el resto de la comunidad, cada vez son menos los que apoyan la política fallida del pasado”, agregó Bilbao.
La audiencia de este martes se celebra “en uno de los momentos más importantes para la isla”, según Leiva.
A su juicio, “en los próximos cuatro años veremos el cambio en Cuba. Esta es una época de retos y amenazas, pero también de esperanzas y oportunidades”.