Las reservas de petróleo de Estados Unidos aumentaron en 4.5 millones de barriles la semana pasada, el uno por ciento más que la anterior, y se situaron en 448.9 millones, informó ayer el Departamento de Energía.
De este modo, los inventarios volvieron a superar el nivel más alto de reservas de petróleo desde la década de 1930, precisó el Departamento.
En las últimas cuatro semanas, las importaciones de crudo tuvieron un promedio diario de 7,136 millones de barriles, un 1.2 por ciento menos que en el mismo periodo del año anterior.
En la semana que terminó el 27 de febrero, las refinerías operaron al 87.8 por ciento de su capacidad, frente al 86.6 por ciento de la pasada semana.
El efecto fue inmediato: Una vez conocido el dato, el precio del barril de petróleo de Texas (WTI) para entrega en abril bajaba 0.69 dólares y se situaba en 47.60 dólares.
GASOLINA SE REDUCE
Por lo que se refiere a los inventarios de gasolina, el informe precisa que se redujeron en 200,000 barriles respecto a la pasada semana, hasta situarse en 239.9 millones de barriles.
Por su parte, las reservas de combustible para calefacción crecieron en 2.5 millones de barriles, hasta los 125.5 millones, un 2.1 por ciento menos que la semana precedente.
Estas cifras excluyen la Reserva Estratégica de Petróleo del Gobierno, que se mantuvo en 691 millones de barriles.
El total de existencias de crudo y productos refinados, incluida la Reserva Estratégica, alcanzó la pasada semana los 1,875.5 millones de barriles, comparado con los 1,873 millones en la semana precedente.
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