Los facilitadores judiciales, tanto rurales como urbanos, ahorran dos millones y medio de córdobas al Estado por cada mediación que realizan en su comarca o comunidad, según declaraciones del magistrado Marvin Aguilar, vicepresidente de la Corte Suprema de Justicia.
Según el magistrado, el costo de un juicio por delitos menos graves es de dos millones y medio de córdobas, según datos proporcionados por la Policía Nacional, Ministerio Público y poder judicial y los facilitadores judiciales realizan al año noventa mil mediaciones, es decir, evitan que se abran costosos procesos en los juzgados, explicó Aguilar.
Por este éxito rotundo, cada año se incrementan estos personajes nombrados por la misma población donde viven y coordinados por la Corte Suprema de Justicia.
Actualmente existen 4,500 facilitadores judiciales en todo el país, de estos 2,000 son rurales.
OFICINAS EN MATEARE
Ayer se inauguró la casa de los facilitadores judiciales en Mateare, donde están juramentados treinta facilitadores desde el 2008. Dos están ubicados en las comarcas Las Yucas y Las Lajas, que están ubicadas a dos y tres horas de camino de Mateare, dijo Pablo Avendaño, juez local único de la localidad.
Del 2008 a la fecha han resuelto 3,712 mediaciones y beneficiado a más de siete mil personas, dijo el judicial.
“Estos casos se resuelven de forma amistosa y ya no pasan a ser carga del juzgado, que es tardado, y se invierte bastante dinero”, dijo Avendaño.
En el 2008 resolvieron 212 mediaciones, mientras que en el 2014 realizaron 1,185 mediaciones, la cantidad aumenta a medida que los ciudadanos se empoderen del servicio, lo conozcan y confíen en él, comentó el juez.
Entre los casos que los facilitadores pueden mediar están los pleitos vecinales, por animales, árboles que se pasan al otro patio y dejan basura, faltas penales, delitos patrimoniales donde no haya violencia entre otros que tienen penas menores a los cinco años de cárcel.
Además las mediaciones que realizan deben ser revisadas e inscritas en el juzgado correspondiente.
