El vicepresidente de Nicaragua Omar Halleslevens, también exjefe del Ejército, defendió la Ley de Seguridad Soberana que los diputados orteguistas aprobaron en la Asamblea, que según expertos en seguridad otorga súper poderes a la institución armada.
“(La Ley de Seguridad Soberana) viene a ser una ley más incluyente (…) agrega aspectos que hoy han tomado más fuerza y visibilidad como el delito cibernético, como el crimen organizado y la presencia de maras en los países hermanos del triángulo del norte”, argumentó el vicepresidente.
La nueva ley, según Halleslevens, viene a modernizar la Ley de Seguridad Democrática porque establece cuál es el papel que deben de jugar las instituciones ante amenazas de desastres naturales y las maras.
Sin embargo, expertos en seguridad y organizaciones de la sociedad civil estiman que la ley, promovida en el parlamento por el presidente inconstitucional Daniel Ortega, tiene como propósito criminalizar las protestas.
La ley coloca al Ejército encima de instituciones como la Fiscalía, que es la encargada de representar a las víctimas en un proceso judicial y al Poder Judicial que es el encargado de administrar la justicia.