En 1971 y tras haber dirigido su primer largometraje —THX 1138—, George Lucas creó la compañía Lucasfilm. Su primera producción fue American Graffiti, pero ya estaba pensando en su aventura galáctica después de desechar la adaptación al cine de Flash Gordon al no conseguir los derechos.
A comienzos de 1973 se centró en la escritura de su nuevo proyecto, The Star Wars, claramente influido por la estética y filosofía de un clásico del cine japonés, The Hidden Fortress (La fortaleza oculta), de Akira Kurosawa, y desarrolló una primera sinopsis.
Pero no fue fácil encontrar el estudio que se arriesgara a financiar los ocho millones de dólares presupuestos para su producción. Universal y Disney lo rechazaron porque no confiaban en una historia que no encajaba en ninguno de los géneros clásicos y fue finalmente la 20th Century Fox la que lo aceptó.
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A partir de ahí, Lucas escribió toda la historia de los Skywalker y de la guerra por el control del universo, aunque en un primer momento el héroe se llamaba Starkiller (el asesino estelar), un nombre que el realizador decidió cambiar para que nadie creyera que el protagonista era un asesino malvado como Charles Manson.
Star Wars se estrenó el 25 de mayo de 1977 en el teatro Grauman de Los Ángeles. El éxito fue inmediato. Batió todos los récords de taquilla con 775 millones de dólares de la época, una cifra que, ajustada a los datos de inflación, la sitúan como la segunda más taquillera de la historia, solo por detrás de Gone with de wind (Lo que el viento se llevó), según datos de la web especializada Box Office Mojo.
En 1980 se estrenaría The Empire Strikes Back (El imperio contraataca) y en 1983 Return of the Jedi (El retorno del Jedi).
El universo de los Jedi caló profundo. Sus héroes, Luke, Han y Leia, los maestros Yoda y Obi-Wan Kenobi, las extrañas criaturas R2-D2 o C-3PO y, por supuesto los malvados Vader y el emperador.
DE LA MANO DE DISNEY
El éxito se repitió en la segunda trilogía en cuanto a cifras de recaudación, pero el interés descendió bastante. En noviembre de 2012, unos días después de que Disney comprara Lucasfilm, se anunció con bombos y platillos que se rodaría la tercera trilogía soñada por George Lucas.