La industria cárnica teme que la reducción de la factura petrolera con Venezuela —provocada por la caída del precio del crudo— desencadene una reducción de las compras de ese país al sector.
Eso, junto a las afectaciones que seguiría provocando el supuesto contrabando de ganado, pondrían en riesgo a esta industria que cerrará el 2015 encabezando la lista de las exportaciones con un aporte de 467 millones de dólares a los ingresos totales que el país percibe por el envío de productos al mercado internacional.
“Hay una gran incertidumbre en cuanto a los volúmenes de compra que Venezuela hará el próximo año”, admitió Onel Pérez, director ejecutivo de la Cámara Nicaragüense de Plantas Exportadoras de Carne Bovina (Canicarne).
Pese a encabezar la lista de las exportaciones, el sector cierra el año con sus cifras en rojo, al reportar una caída del 5.11 por ciento en el volumen de sus exportaciones y del 1.64 por ciento en el valor de estas. Situación que pone fin al crecimiento sostenido de los últimos años. Ante este panorama no se atreven a hacer proyecciones del desempeño para el próximo año.
“No puedo dar proyección de las exportaciones del próximo año, porque como todos conocen el precio del petróleo ha bajado de unos 110 dólares por barril a unos 38 dólares por barril, que significan aproximadamente un 66 por ciento de reducción. Eso significa que la factura petrolera con Venezuela se ha visto seriamente afectada y por eso es muy probable que (ese país) va a tener dificultades para comprar los mismos volúmenes de alimentos, principalmente de carne bovina”, explica Pérez.
Actualmente, un porcentaje de dicha factura se paga con alimentos. Desde el 2008 existe un contrato que facilita el envío de carne a Venezuela a través de Albalinisa. Según las estadísticas del Centro de Trámites de las Exportaciones (Cetrex), ese año el envío fue de solo 4,455 toneladas. En 2009 este creció a 16,955 toneladas. Para el 2010 se elevó a 30,553 toneladas. Al año siguiente, a 38,011 toneladas y en 2012 alcanzaron su pico con 44,035 toneladas.
Pero, desde ese año las compras se han venido reduciendo, en 2013 solo se enviaron 34,111 toneladas y al año siguiente 19,597 toneladas. Este año, hasta el 16 de diciembre, se han enviado 23,289 toneladas, detalla el Cetrex.
Para Canicarne todo indica que el próximo año las exportaciones se van a reducir más y si eso ocurre habrá excedentes que se tendrán que colocar en otros mercados.
“Principalmente en Centroamérica”, el temor es que estos pueden saturarse y si esto ocurre “lo más probable es que se acentúe la caída del precio de la carne. Ese es el panorama para el próximo año”, advierte Pérez.
El presidente de Canicarne, Raúl Barrios, es más optimista, pues considera las plantas mantendrán su ritmo de operaciones porque existe mercado para colocar el excedente que generaría la merma de las compras de Venezuela, “aunque a precios menores”.
No obstante, el expresidente de la organización, José Daniel Núñez, reconoce que de concretarse la merma en las compras y mantenerse el supuesto contrabando, las plantas deberán reducir su ritmo de operaciones al menos durante el primer semestre de 2016.
Otra opción sería incrementar la venta de carne industrial a Estados Unidos, pero en ese mercado el precio también está bastante bajo.
OTROS PROBLEMAS
En las últimas semanas los ganaderos han amenazado con reducir la entrega de reses a los mataderos, en respuesta a una reducción de unos veinte córdobas en el precio del kilo de carne en canal caliente: las plantas bajaron de 120 a cien córdobas dicho precio. Y según Pérez de acuerdo al precio internacional, este debería de rondar los noventa córdobas.
El sector reiteró su llamado a las autoridades a poner fin a la supuesta salida de ganado de contrabando, ya que aseguran que con la salida este año de unas doscientas mil cabezas, el país dejó de percibir unos 240 millones de dólares que habría obtenido si las hubiesen enviado procesadas.
En declaraciones a Canal 23, el asesor presidencial para asuntos económicos, Bayardo Arce, insistió en que el acuerdo petrolero con Venezuela se mantendrá invariable a pesar de la reciente derrota electoral que sufrió el chavismo.
