Empresarios deben ser beligerantes
Sobre el artículo de opinión En 2016: cuidemos el sector de la construcción, que LA PRENSA me publicó el 8 de enero corriente, un notable colega de la ingeniería me expresaba que: “Entre los desafíos del Gobierno siento que no le diste acento como lo merece a los temas de la corrupción y la falta de transparencia de la gestión en todos los niveles, que está afectando su desempeño, entre otras cosas, por la falta de beligerancia del organismo contralor que bien conocés. Mirar hacia otro lado y desconocer estas realidades limita nuestra visión crítica del quehacer constructivo en Nicaragua. En este año eleccionario no alcanzo a visualizar una perspectiva optimista para nuestro país, salvo en el corto plazo en que se concentra tu análisis”.
Ciertamente, respondí, hizo falta una referencia vehemente y categórica a este fenómeno que lamentablemente ha crecido en los últimos años y nos hace tanto daño. La corrupción es nociva no solo por violar la ley y burlar principios éticos, sino que además, su práctica encarece los proyectos, disminuye su calidad, genera ineficiencia, crea un riesgo a los usuarios futuros de la obra, pero también, es causa de subdesarrollo, pobreza y crisis de gobernabilidad.
Atendiendo el atinado y fraterno señalamiento del colega, debo reconocer que su efecto (de la corrupción) es tan corrosivo y destructivo, que en el último informe de Funides se le señala como “el factor que más está incidiendo de manera negativa en la actividad económica del país con 86 por ciento”, por lo que sus causas deben ser atendidas con fuerza y prioridad para evitar que siga creciendo y erradicarlo.
Pero este desafío no solo es del actual Gobierno (en cuyo periodo la corrupción se ha incrementado exponencialmente), sino de la población en general y también de los empresarios. Por eso el Cosep, Cadur y la Cámara de la Construcción, que han tenido un excelente desempeño en apuntalar al sector de la construcción, deben continuarlo, asumiendo un rol protagónico sobre el caso del escandaloso préstamo del Instituto Nicaragüense de Seguridad Social (INSS), (que recientemente develó la encomiable investigación periodística del joven Octavio Enríquez): 1) investigándolo diligentemente por su cuenta, 2) tomando oportunamente y con determinación las decisiones pertinentes, y 3) informando con diligencia a la ciudadanía.
El combate a la corrupción debe ser prioridad del Gobierno, de los gremios y de toda la sociedad, pues si no se hace este mal afectará negativamente no solo el buen desempeño que se espera del sector de la construcción, sino, sobre todo, aumentará la crisis de valores, deteriorará la estabilidad de las familias nicaragüenses, y abortará el futuro promisorio que tiene nuestra bendecida nación, condenando a la mediocridad y a la pobreza a la juventud.
Agustín Jarquín. Ingeniero.
Nuevos diputados venezolanos
Resulta reconfortante observar y escuchar a los nuevos diputados de la Asamblea Nacional venezolana confirmar una y otra vez que todos los planteamientos que harán para ayudar a resolver la crisis que vive Venezuela estarán dentro del marco jurídico establecido.
Esta forma de actuar produce una tranquilidad especial a la población en general aunque los diputados oficialistas cacareen hasta el cansancio y se opongan a las nuevas iniciativas que desde su inicio ha expuesto la oposición.
El finado Hugo Chávez Frías lo dijo cientos de veces: “Fuera de la Constitución nada, dentro de la Constitución se puede cualquier cosa”, “Dentro de la Constitución todo, fuera de ella nada”, “Siempre en el marco de la Constitución, dentro de ella todo, fuera de ella nada”. Esa imagen del golpista ya presidente mostrando el pequeño libro de la Constitución muchísimas veces la tengo grabada en mi mente.
Sin embargo, Rubén Contreras nos recuerda en un artículo publicado en noticierodigital, en el 2012, que “el mismo Chávez después de aprobar la Constitución, empezó a mostrar su tendencia totalitaria y propuso una enmienda, para convertir a Venezuela en un Estado socialista, cuya base primigenia fuese la comuna, al más puro estilo comunista, como lo trató de imponer José Stalin en Rusia, con la colectivización de los medios y modos de producción”. Y cuando lo hizo “el teniente coronel olvidó su frase, acerca de que esa Constitución regiría en Venezuela por espacio de 200 años”.
Contreras aclara que “en la Constitución de Venezuela no se mencionan las comunas ni nada parecido, y cuando esta habla de la división política territorial de la república de Venezuela, menciona a los municipios como base de la organización territorial”.
También hemos tenido la oportunidad de ver y escuchar al nuevo presidente de la Asamblea Nacional, Henry Ramos Allup repetir una y otra vez, emulando al finado mostrar la Constitución, y sentenciar la famosa frase “dentro de la Constitución todo, fuera de ella nada”. Así lo vimos hace unos tres años en una reunión en el Palacio de
Miraflores donde le señaló al presidente Maduro por ejemplo, que la palabra socialismo no aparece en la Constitución.
Con esta norma suprema de un Estado de derecho soberano —la Constitución de 1999— promovida por el mismo difunto, el gobierno chavista, con el presidente Nicolás Maduro y sus acólitos más temprano que tarde tendrán que irse. En términos populares podríamos decir, que esta Constitución será cuchillo para su propio pescuezo, aunque esto se lleve algún tiempo.
Carlos Vílchez Navamuel
Crucigramas errados
Soy lector de LA PRENSA desde hace más de cincuenta años y, además, escritor de artículos en ese mismo Diario. Tengo un gran aprecio por lo que significa LA PRENSA para todos los nicaragüenses; y me agrada ratificar la influencia diversa que ejerce el Diario entre todos nosotros.
Desde hace varias semanas he notado errores garrafales en la publicación del crucigrama diario. El publicado el pasado 30 de diciembre tenía unos enredos fenomenales. El crucigrama es una parte muy esperada por miles de personas, sobre todo por gente de la tercera edad. Hace unas semanas, en una reunión de varios amigos de esa organización, comprobé que se están dando cuenta de esos errores y se están formando una mala imagen del Diario por entregar un producto muy mal elaborado, o presentado. Existe una gran cantidad de personas que usan el crucigrama para varios objetivos por lo que es necesario que revisen esa parte.
Para bien, o para mal, yo soy profesor y conozco del uso del idioma. Por esa razón me llama la atención que en un diario como LA PRENSA descuiden la escritura, tanto en ortografía como en sintaxis. Todos los días constato los errores de ortografía, sobre todo en las páginas de Deportes.
Debo indicar, que donde menos faltas encuentro es en los artículos del licenciado Edgard Rodríguez.
Augusto Zelaya Úbeda. Maestro.
Asaltos en motos
Los asaltos en motos es la amenaza de todos los días: un motociclista sin placas, acompañado de otro delincuente asaltan a mano armada a inocentes civiles en pleno día.
Esto sucede todos los días y a toda hora. La noche del pasado 29 de diciembre del 2015 fue asaltado un repartidor de pizza, Mario Zarate Guevara, quien al acelerar su moto los asaltantes, que iban en otra moto, le dispararon causándole lesiones lumbares graves.
Cuál es el antídoto para estos asaltantes: Hacer una ley en que todo motociclista obligatoriamente porte un chaleco en la espalda donde esté señalado claramente el número de la placa de la moto que conduce, si lleva acompañantes, también debe portar el chaleco con la placa a sus espaldas. Después de las 6:00 de la tarde que sea prohibido circular dos en una moto, los que no cumplan este requisito no pueden circular. ¡Cuántos asaltos y muertes se evitarían! Tiene la palabra la Policía.
Enrique Padilla Santos.
