El tributo de Lady Gaga al fallecido David Bowie fue uno de los momentos estelares de la 58 edición de los Premios Grammy, que se celebró anoche en Los Ángeles, y en la que también se les rindió homenaje a otros músicos fallecidos como Glenn Frey, Maurice White o B.B. King.
Con un juego de luces que dibujaba sobre su cara los mil y un rostro del camaleónico artista, Lady Gaga ofreció un espectáculo muy visual y colorido en el que enlazó canciones de Bowie como Space Oddity, Changes o Ziggy Stardust.
Con traje blanco y cabello pelirrojo, Gaga tocó un piano que parecía moverse como un robot y bailó junto a la guitarra de Nile Rodgers.
La traca final llegó con Heroes, cuya interpretación culminó Lady Gaga mientras emergía de una pantalla la imagen de David Bowie sobre un fondo espacial.
El show de este año, según los comentarios de los televidentes en las redes sociales, fue uno de los mejores en los últimos años.
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