Muchas de las prendas de su armario no nacieron para la función que tienen actualmente. Hay que remitirse a los libros de historia y a los mitos para conocer su origen.
Se dice que el color kaki de los pantalones casuales, también conocidos como chinos o kakis, se dio cuando un comandante inglés que estaba en la India ideó teñirlos con un color terroso para disimular la suciedad de los pantalones blancos que usaban.
La corbata puede tener varios orígenes, uno data de la época de los romanos, quienes llevaban en sus vestuarios del ejército una especie de estola roja en el cuello. Por otro lado, a mediados del siglo XVII, al rey Luis XIV le fascinó una tela blanca amarrada al cuello con un nudo en forma de rosa que lucían las tropas del ejército croata durante un desfile. El monarca no dudó en incluirlo en su vestuario pasando a llamarse cravate en Francia.
Luis XIV es protagonista de la siguiente historia, pues al ser de pequeña estatura, pidió le diseñaran unos zapatos con tacón para lucir más alto. Asimismo, existe el mito de que fueron los carniceros del Antiguo Egipto quienes idearon un tipo de tacón para evitar pisar la sangre derramada en el suelo. Otra teoría dice que los faraones los utilizaban como símbolo de poder y se menciona que los jinetes mongoles los empleaban para subir a los caballos.
Seguramente ha escuchado sobre el origen de la camiseta T-Shirt, cuyo nombre se refiere teóricamente a la forma de su diseño y se popularizó tras la Segunda Guerra Mundial al ser parte de la ropa interior de los soldados estadounidenses. También, los británicos se adjudican su invención en el siglo XIX cuando los criados vestían camisas mangas cortas y de lino a modo de mandilón para servir el té, ya que las manchas que quedaban de la infusión no se quitaban fácilmente, de manera que las llamarían Tea-shirts.