Las autoridades de la Policía de León presentaron a Marvin Bravo, de 27 años, quien presuntamente mató de varios machetazos al señor Máximo Esquivel, de 87 años, la noche del jueves 31 de marzo, en la calle 10 del Reparto Rubén Darío, León.
Bravo, además de cometer el hecho sangriento, macheteó a su cónyuge Ligia Daniela Ponce, de 24 años, y a su suegra María Mercedes Ponce, de 64 años, quienes se encuentran estables en el Hospital Escuela Óscar Danilo Rosales Argüello, de León.
Según declaraciones del detenido, el día que ocurrieron los hechos, llegó a la vivienda en estado de ebriedad y drogado. Dijo que solo recuerda el inicio de una discusión con su pareja y los actos sangrientos que cometió.
“Fumé droga, marihuana y piedras (de crack) y andaba tomado, iniciamos una discusión y ella me tiró la comida, ella tenía a otro, estoy arrepentido por lo que me pasó, le digo a la familia que me perdone, que si tuviera consciente no lo hubiera hecho. Yo no me acuerdo, tampoco me acuerdo cuando la Policía me trajo (detenido)”, dijo Bravo.
Según el comisionado Miguel Carmona, jefe de Auxilio Judicial de la Policía de León, “logramos determinar de que la causa de la muerte del señor Máximo Esquivel, de 87 años, fue producto de una decapitación semicompleta con un arma cortopunzante, se presume que es un machete”, expresó Carmona.
“El sujeto tenía una relación conyugal con Ligia Daniela Ponce, iniciaron una riña, tenían antecedentes de alteraciones escenificadas por ellos mismos, se especula que estas personas consumían alcohol, más el caso de Marvin, quien se dedicaba como carretonero y por la tarde consumía de manera consuetudinaria alcohol, esta persona presenta una deformación en su conducta, es un agresor y agredía a su madre”, manifestó Carmona.
CRIMEN DESATA FURIA
El día de los hechos los pobladores escucharon los gritos de auxilio y desesperación y llegaron a prestar ayuda, por lo cual el victimario huyó en la oscuridad. Horas más tarde fue capturado por la Policía con ayuda de familiares de las víctimas, en el Anexo del Reparto Tomás Borge, a unos seis kilómetros de distancia de donde cometió el crimen.
Según los familiares y testigos, el anciano la semana pasada había denunciado a Marvin Bravo, ya que en reiteradas ocasiones había agredido a su hijastra, por lo cual el señor solicitó a las autoridades policiales la detención del sujeto. Bravo llegó a la vivienda que alquilaban Máximo Esquivel y María Mercedes Ponce y sin mediar palabras atacó con un machete al señor, a quien degolló.
Daniela Ponce quiso defender a su padrastro, pero recibió varios machetazos en la mano y la cabeza. Al ver que intentaban matar a su hija, María Mercedes intervino y también el furioso hombre le propinó machetazos en la cabeza