En busca de desechar el delito de tentativa de violación, Jacinto Miranda, abogado defensor de Silvio Mayorga González, acusado de asesinar a Ángela Crespo, meterla en bolsas plásticas para la basura y arrojarla dentro de un cauce en el barrio San Judas de Managua, reveló que su representado tenía nueve meses de mantener una relación de pareja con la ahora difunta.
Este dato, podría cambiar la tipificación del delito de asesinato a femicidio, pues existía una relación de pareja entre víctima y agresor.
Según la condición que impusieron los legisladores para que un hecho pueda calificarse como femicidio, debe haber existido un vínculo entre víctima y agresor.
La información la dio a conocer Miranda durante la audiencia preliminar, a la juez Fabiola Betancourt, titular del Juzgado Primero Especializado en Violencia, con el ánimo de que la judicial no admitiera la acusación en cuanto a la tentativa de violación, pues consideraba que no existía, y al quedar acusado del supuesto asesinato, el caso debía ir a un juzgado común.
Sin embargo, la judicial le dijo que las calificaciones son provisionales, y que si más adelante se demuestra lo contrario, entonces le corresponde al juez de juicio hacer una recalificación de los hechos, por lo tanto no era el momento procesal, y admitió la acusación tal y como fue presentada por el Ministerio Público.
La familia de la fallecida desconoce que Crespo haya tenido alguna relación amorosa con el presunto agresor, porque aseguran que nunca les dijo nada ni lo llevó a la casa. Además, ella ya tenía su pareja en casa. “Nosotros desconocemos eso. Ella (la víctima) nunca nos dijo nada de él, ni lo llevó a la casa, porque tenía su pareja”, dijo Luz Marina Díaz Crespo, hermana de la difunta.
Durmió con el cadáver
Según el Ministerio Público, los hechos se dieron el pasado 9 de octubre, después que la víctima saliera de su casa ubicada en el barrio Los Martínez en compañía de Marcos Robleto Martínez al bar Perla, donde consumió dos litros de cerveza con su acompañante. A las 6:30 p.m. la joven se trasladó sola al Reparto Miraflores donde queda Tiky Bar y se encontró con el acusado y tomaron cerveza.
A eso de las 8:00 p.m., ambos se trasladaron al barrio San Judas, al cuarto que alquila el acusado. Cerca de las 9:00 p.m., una vez que están en la cama de la habitación, la joven víctima recibió una llamada telefónica de su mamá Carmen Crespo, quien le dijo que se fuera a cuidar a sus hijos, por lo que esta decidió marcharse, pero Mayorga no la dejó, dice la acusación.
“El acusado se molestó y en una manifestación de poder empezó a discutir con la víctima porque no quería que se fuera y mediante el uso de la fuerza procedió a despojarla de la ropa para someterla sexualmente y para neutralizarla le dio con un objeto de concreto, varias veces en la cabeza y le causó seis heridas que le causaron un trauma craneoencefálico que le causó la muerte”, dijo la fiscal Eilyn Cruz.
El acusado durmió con el cadáver de la víctima esa noche y luego lo mantuvo oculto en la habitación por más de 20 horas hasta que consiguió una carretilla y bolsas plásticas negras donde metió el cuerpo de la mujer amarrado con tiras blancas y moradas y lo metió en las bolsas, esperó hasta la madrugada para deshacerse del cuerpo tirándolo en el cauce que pasa por el barrio San Judas, refirió la fiscal. Según Medicina Legal, la víctima tenía entre 28 y 52 horas de muerta.
Al psiquiatra
Jacinto Miranda, defensa de Silvio Mayorga, dijo a los medios que como prueba de la relación que su patrocinado mantenía con la víctima, presentará ropa que esta mantenía en la habitación de Silvio Mayorga. Además, solicitó valoración psicológica y psiquiátrica para su representado, porque asegura que dice incoherencias. La audiencia inicial fue programada para el 27 de octubre.